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Los elegidos - por Pilar (marazul)R.
«Dicen que hay que conservar lo antiguo, que esta cabina tiene mucho valor, pero a mi me parece un basurero. No sirve más que para acumular latas, botellas y restos de comida.¡Pero qué cochina es la gente, para qué querrán las papeleras!»
En estos pensamientos está Paqui mientras limpia la cabina de teléfono que hay en la Estación. Se ha puesto los cascos para escuchar su programa favorito de radio, el de sucesos.
«Si ya lo digo yo, que hay mucha gente rara. No hay más que ver a los que suben y bajan de los trenes.¡Menudas pintas algunos y qué lenguaje utilizan ahora los jóvenes!»
Ella no es que sea muy mayor, cuarenta y cinco tacos ya tiene, pero por lo menos es respetuosa con los demás.
Se protege con mascarilla y guantes para evitar los olores a orines y de cualquier extraña enfermedad. Hoy mismo ya ha tenido que retirar varios preservativos.
No es que se queje del trabajo, que nadie le dice cómo tiene que hacer las cosas. Solamente Rodolfo, el jefe de estación, a veces le dice algo, pero es bastante majo y se suele echar un pitillo con él después del trabajo.
Cuando se quita los cascos se sorprende al escuchar un ¡riin, riin! desconocido. No se trata de su móvil que en este suena una canción de Bisbal. Se da cuenta de que es el mismo teléfono de la cabina el que suena. «Pues va a ser que funciona este trasto»
La Paqui ni se lo piensa, va y lo descuelga.
—¿Diga? —se escucha un silencio—.A ver dígame ¿quién es? Que no tengo todo el tiempo del mundo, que estoy trabajando.
—Eres la elegida –se escucha decir a alguien con una voz rara, así como metálica.
—Oiga que no le voy a comprar nada ¿eh? Y si es una broma, ¡me cago en sus muertos!
—Mañana a las veinte horas en el camino de las estrellas —dice la voz antes de colgar.
«Menudo cachondeo se trae la gente, que manera de invitar a una fiesta»
La verdad es que el camino de las estrellas no está lejos de su casa. Es un lugar tranquilo a donde suelen ir los jóvenes para contemplar el firmamento y también a fumarse unos porros. Ella misma ha ido varias veces con amigos en alguna noche de cielo despejado.
«¿Y si fuera? Total a esas horas no tiene mucho que hacer, solo ver alguna serie. Y este pueblo es tan aburrido, nunca pasa nada.»
Al día siguiente Paqui, muy decidida a llevar a cabo su pequeña aventura, coge la bicicleta para dirigirse al lugar señalado. Le pica la curiosidad.
Aún no ha anochecido y ya puede divisar a lo lejos que hay movida. ¿Será una fiesta?, piensa una Paqui emocionada. No distingue bien porque empieza a caer la niebla y solo ve luces al final del camino. Tiene que dejar la bicicleta a un lado y seguir a pie, detrás de otras personas que como ella se dirigen a la luz. Una luz que según avanza empieza a ser más intensa. Siente una atracción irresistible, la envuelve una sensación de paz muy cercana a la felicidad. Todo: el olor, el ambiente nebuloso, el sonido del silencio…la embriaga. Siente que no es dueña de su voluntad. Su mente no quiere regresar, solo desea alcanzar la luz. Algo, una fuerza desconocida, la succiona.
Ya no hay retorno.
Adolfo, el jefe de estación, se extraña de que este lunes Paqui no haya ido a trabajar. Piensa que puede estar enferma, pero le parece raro porque, aunque un poco alocada, ella siempre avisa. Además la está llamando al móvil y no da señal.
«¡Esta mujer! Habrá estado de juerga el fin de semana, que no es la primera vez»
A punto de salir el tren de las 12:30 un chaval que pasa delante de la cabina oye sonar el teléfono. Extrañado se acerca para descolgarlo cuando la voz de su madre le apremia.
¡Pablo, vamos no te entretengas, sube al tren que va a salir ya!
Comentarios (13):
IreneR
17/03/2025 a las 15:48
Buenas, Pilar.
Pobre Paqui. La curiosidad mató al gato… Más le habría valido quedarse en su casa viendo una serie, o no. Igual al final era una mega fiesta y lo está disfrutando como nunca.
El final me ha parecido muy acertado. Que el teléfono volviera a sonar para captar a alguien más. Aunque esa última frase no lleva guion de diálogo, así que me ha costado un poco darme cuenta de que era un personaje el que hablaba, y no el narrador.
Nos leemos.
Un saludo.
Irene
Cristina Otadui
17/03/2025 a las 21:47
Hola Marazul:
buena descripción del personaje principal revelado a través de sus pensamientos y el diálogo interno que la humaniza. La forma en que describe su entorno y las personas que pasan por la estación refleja una mezcla de frustración y curiosidad, lo que añade profundidad a su personalidad.
El contraste entre su rutina y la misteriosa llamada proporciona a la historia un giro interesante: el cambio de tono, de la monotonía a la emoción es un buen recurso narrativo.
Creo que el final deja muchas preguntas sin respuesta, que puede ser intencionado con el fin de generar intriga pero también puede resultar desconcertante si el lector gusta de cierres mas claros.
La crítica hacia la juventud y su comportamiento no deja de ser un estereotipo facilón que no acaba de encajarme en una mujer de 45 años que al día de hoy creo que no son tantos.
Por lo demás una buena historia, bien hilada y que resulta
Felicidades, gracias por escribir y compartir,
¡¡Nos leemos!!
Yvonne (María Kersimon)
18/03/2025 a las 22:25
Hola Marazul,
¡Buenas! Contenta de leerte otra vez. Has escrito un cuento entretenido. Me ha gustado el tono coloquial que prestas a la protagonista. La descripción de la cabina con sus desperdicios heterogéneos y cómo los describe ¨la Paqui¨, así como la descripción de la misma Paqui, su relación con el jefe de estación. En fin, la creación del personaje es el aspecto del texto que más me ha llamado la atención y, creo, el más trabajado. También, la manera en que iba a contestar el niño y como la madre tira de él y evita que se quede ¨pillado¨. Lo demás, la abducción por la luz que, por cierto, parece benevolente, le sirve de cierre al cuento. No chirría. Se acepta con facilidad ya que con las premisas que teníamos era casi inevitable versar en lo sobrenatural.
Saludos.
Patricia Redondo
19/03/2025 a las 08:45
Buenas Pilar
Ay la Paqui! Tanto criticar a la juventud y mira tú ella , que ganas de “marcha” tenía ! Me han encantado el personaje y el tono. Muy coloquial, muy visual. Me la imagino perfectamente en esa cabina cochambrachosa , con el pañuelo en la cabeza y sacándose de vez en cuando la mascarilla para pegarle una calada a un cigarro a medio consumir…
No sé si a la Paqui se la llevan los extraterrestres, tipo “Encuentros en la tercera fase”, o la parca, pero si al final ha encontrado la felicidad completa, que se le negaba en su anodina vida, me alegro por ella.
Y me alegro por Pablo , salvado por los pelos y por su madre, de seguir el destino de Paqui.
Moraleja: ojo con coger según que llamados si no quieres desaparecer de este mundo. Tomo nota.
Un relato sencillo , sin complicaciones ni florituras innecesarias que me ha gustado mucho.
No me busques, que este mes entre lios de trabajo y la dichosa cabina parlante que no me acababa de cerrar un relato, no envié nada.
Nos leemos!
Saludos!
Mónica Bezom
20/03/2025 a las 15:46
Hola, Pilar.
Una historia cuya fuerza narrativa descansa mayormente en la personalidad de la Paqui, ya te lo han dicho; sus modos, pensamientos, simplicidad y carácter están notablemente descritos con sutiles pinceladas de humor que hacen navegar la lectura entre la intriga y la sonrisa.
El desenlace es apropiado y el giro final cierra la historia con acierto, a mi modo de ver.
Entiendo que al parlamento final le falta el guión largo.
Ha sido un gusto leerte.
IzMir
20/03/2025 a las 23:09
Me ha gustado mucho el tono y el desarrollo. El final, ¡uf! Espectacular, buen trabajo.
Kelvin I. Márquez
21/03/2025 a las 02:49
Saludos Pilar
La paqui me parece un personaje muy bien construido. El saber lo que ella piensa y como describe su trabajo da mas profundidad y ayuda a que el lector se sumerja en la lectura. El final me parece perfecto. Deja mucho a la imaginación sobre que era esa luz y que le sucedió a la Paqui. Lo único que puedo mencionar que me chocó un poco es la siguiente oración.
«¿Y si fuera? Total a esas horas no tiene mucho que hacer, solo ver alguna serie. Y este pueblo es tan aburrido, nunca pasa nada.»
Entiendo que debería ser tengo en vez de tiene.
En fin, lo importante es que es un excelente relato y me ha encantado.
Saludos y nos leemos!
María Jesús
21/03/2025 a las 11:58
Hola Pilar: Buen relato el tuyo y buena descripción del personaje de Paqui, una señora de la limpieza pasota y resabiada. El toque de ciencia ficción le da un plus de interés, a mi gusto. Buen trabajo.
Ana Tirado
23/03/2025 a las 01:52
¡Hola, Pilar! Encantada de leerte una vez más. Te comento primero lo que más me ha gustado de tu relato:
Para empezar, el personaje de Paqui. Tiene una personalidad bien definida, algo excéntrica y con una manera peculiar de observar el mundo, lo que hace que sea muy fácil imaginarla. Su monólogo interno, sobre todo, es muy visual. Los detalles sobre su vida y su actitud hacen que el personaje se sienta cercano y real.
El giro de lo sobrenatural en el camino de las estrellas es intrigante. La atmósfera se construye bien con la niebla, la luz misteriosa y las sensaciones que describes. Muy bien llevada la situación de suspense.
El final abierto, con Paqui desaparecida y sin saber qué ha pasado exactamente. Me gusta porque invita al lector a imaginar el desenlace que más le encaje, reflexionando sobre el relato cuando este ya ha terminado.
También me ha gustado que incluyas el reto opcional de esa manera. Te esperas que Pablo vaya a recibir el mismo tipo de llamada, así que es un alivio que su madre le interrumpa antes de descolgar. Reconforta un poco después de saber cuál fue el final de Paqui.
Como áreas de posible mejora (aunque esto es muy subjetivo):
El diálogo de la llamada me ha dejado un poco fría ya que el contenido es algo plano. Creo que podría tener un poco más de tensión si jugaras con el misterio en el diálogo, quizá dejar alguna pista más sobre lo que va a pasar (aunque Paqui lo malinterprete y siga pensando que la invitaron a una fiesta).
Por otro lado, la decisión de Paqui de ir al camino de las estrellas es un poco repentina, quizá podrías profundizar más en su pensamiento antes de decidirse.
Un saludo, compañera 🙂
Osvaldo Mario Vela Sáenz
23/03/2025 a las 03:35
Marazul, buenas tardes. un saludo desde México.
Tu relato y la forma de contarlo, ya lo había oído antes. un cliente del negocio de carnes que tenía mi familia, quien era frecuente visitante me llamaba la atención por su pulcritud al vestir.
Siempre de traje de salir, bien plantado y de una energía increíble. Un día le pregunté la edad que tenia y me dijo noventa y cuatro años. Le agradecí la sinceridad y le comenté que, si me hubiera dicho, sesenta y cuatro le hubiera creído.
Mi curiosidad, muy cercana a la tuya, obligome a cuestionarle como le hacía para mantearse así. Su respuesta, que yo sé que tú quiere saber fue: es que no le tengo miedo a la muerte por eso no envejezco. Ante mi duda el continuo. Es que hace 50 años me declararon muerto en un accidente en san Antonio, pero los médicos me regresaron a la vida.
La muerte es la cosa más bonita que he experimentado. Es un túnel que se mece al ritmo de una música como no he vuelto a escuchar y al final de aquella vía de sensaciones únicas, una luz brillantísima. Luz que te llama, luz que te atrae y la que no pude alcanzar.
Ahora sé, que el destino me permitió seguir para gozar la vida en su plenitud y cuando llegue el día buscare esa luz esquiva.
Como puedes ver siempre hay algo que contar.
te felicito y seguimos leyéndonos. Siempre es refrescante encontrar relatos que te conecten a lo vivido.
Pilar (marazul)
23/03/2025 a las 13:28
Hola compañeros literautas:
Irene R, agradezco te hayas pasado por aquí.
Cristina:la verdad es que no soy yo muy de finales cerrados. Prefiero que el lector imagine.Es verdad que los comentarios de la Paqui sobre la juventud es un estereotipo facilón,, pero me puse en el lugar del que lo limpia. Agradezco mucho tu comentario.
Ivonne: totalmente de acuerdo en que en este caso es muy difícil no echar mano de lo sobrenatural. Gracias por leer y comentar.
Patricia: ja,j,ja…así es: la Paqui está tan aburrida en este pueblo que se apunta a lo que ella pensaba iba a ser una “macrofiesta”, pero seguro que está encantada con los alienígenas.Te leo en la próxima, Patricia.
Mónica: quise terminar bien el relato y por eso salvé al chico. Salvado por la campana del jefe de estación, en este caso. Gracias.
IzMir: Agradezco mucho te hayas pasado para comentar.
Kelvin: pues tienes toda la razón en cuanto al verbo. Evidentemente, como bien dices debería de ser “tengo”. Gracias por pasarte y leer mi relato.
María Jesús: me alegra tu comentario. Gracias.
Ana Tirado:lo primero darte las gracias por tu amable comentario. También decirte que tomo nota de tus dos consejos: en el diálogo de la llamada se puede profundizar más, y en la decisión repentina de la Paqui de ir al camino de las estrellas, es que ella es así, impulsiva je,je…
Osvaldo, amigo, me ha parecido muy interesante lo que cuentas y como lo has conectado con mi relato: los elegidos.
Un abrazo general a todos. Me paso por los vuestros.
Alberto Suárez Villamizar
24/03/2025 a las 18:46
Hola, Pilar
Tu historia hace referencia a las muchas cosas que le pueden ocurrir a una persona, y plantea la inquietud, ¿Qué pasó con Paqui?, porque debió ser algo serio para que faltara al trabajo. Así mismo, es la situación que se le puede presentar a cualquier persona que atiende llamadas o invitaciones de desconocidos. Una historia entretenida, me gusta que plantea la duda sobre el paradero de Paqui.
Te agradezco, el comentario que hiciste a mi historia “Solamente una vez”, y te aseguro que me servirán para mejorar en mis escritos.
Nos leeremos en el próximo reto.
José Torma
24/03/2025 a las 19:54
Hola Pilar (MarAzul).
Ha creado, en un par de párrafos, un personaje entrañable, fácil de apreciar. Con pinceladas vas pintando todo un mural con detalle aquí y detalle allá que cuando tomas distancia, muestra una gran fotografía.
El tema sobrenatural del teléfono me gustó, yo hice algo similar.
¿Cuánta genta habrá recibido la llamada, quien llamó? Nos lo dejas a la imaginación y eso entretiene.
Fuera del último dialogo, yo tampoco encontré algo mencionable en lo técnico.
Muchas felicidades.