Literautas - Tu escuela de escritura

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Solo para mis nietos - por AmadeoR.

Fui testigo de algo increíble y para poder bien contarlo a mis nietos —cuando sea abuela— decidí escribirlo.

«Todos los atardeceres, cuando regresaba del trabajo en la oficina, pasaba frente al enorme tapial, de casi dos metros de altura, de la fábrica BRINIG S.A., y ayer pude confirmar que lo han repintado de color cielo gris. Todo muy prolijo, pero de pronto vi, lejos del portón de entrada, que había una grieta en la pared. Una grieta rara, grande y por ser curiosa, confirmé que no había transeúntes en la cuadra y me acerqué para espiar. La rajadura tenía forma de una ese acostada, ondulada como una serpiente enorme, donde en una parte, la rajadura era profunda y sin el revoque y por allí se filtraba la luz proveniente del gigantesco cartel de la fábrica.
Apoyé la cabeza en la pared y con el ojo derecho miré por la rajadura, pero no pude ver porque me lo impedía la luz verdosa e incidente del letrero encendido. Encandilada y antes de retirarme escuché murmullos de voces agudas y arrimé mi oreja izquierda, la menos sorda, y algo entrecortado escuché decir:
—Pintmos menos dos hora. Todavía debe secándose.
—Mañan queda nada.
—Suerte BNUGER, sabe comenzar.
—Llega, nos out. The nave.
—Roto listo la explon.
—Si BNUGER Premio The nave tras fin.
—Los cien vein out y paz.

Asustada y sin comprender, pero intuyendo peligros, alejé la oreja e intenté mirar para ver a quienes hablaban. Nuevamente me cegué y cómo fisgona que soy, me prometí ir a casa y volver a pasar a la mañana más temprano, yendo a la oficina.

Cuando amanecía, y tal vez por un desperfecto el cartel no iluminaba, yo me acerqué a la grieta y aun en la penumbra, los pude ver.
Eran apenas brillantes, no muy altos, todos con formas esféricas deformadas, de diferentes multicolores débiles, la mayoría eran inquietos con breves movimientos esporádicos. Algunos parecían conversar murmurantes en un idioma desconocido por mí.
Tras un momento de silencio e inmovilidad total escuché, a través del paredón, una muy breve pero potente vibración aguda. Volví a mirar atenta a esos entes y noté que, en fila india formaban grupos alineados, tipo soldados en desfile y se dirigían a un extremo del tapial. Cuando dejé de ver al último, nació un relámpago o algo similar y en silencio pleno, solo ubiqué el frente de la fábrica.
De pronto percibí voces, acerqué la oreja hasta casi adentro de la grieta y, sin poder verlos, presté atención a dos voces bien diferenciadas:
—Misió hecha end
—uí nave. ui está proxim
—Sí, BNUGER Premio
—Sí, NHYBER Triunf

Ante una nueva calma y viendo que comenzaban a circular gente por la calle, decidí ir al trabajo y no contar nada, pues me tomarían por loca. Ya en mi escritorio simulaba trabajar, pero estaba concentrada en lo acontecido en BRINIG S.A.

A media tarde, salió nuestro jefe de su oficina y nos pidió, casi a los gritos:
—¡Enciendan las radios, pasó algo tremendo! ¡Escuchen!

Perplejos, atendimos la noticia:

“URGENTE… ÚLTIMO MOMENTO… La fábrica BRINIG S.A. implosionó y desapareció.
¡DESAPARECIÓ!… ¡Si! ¡DESAPARECIÓ!… No hay restos de ella, no hay escombros ni partes metálicas de las maquinarias. Tampoco cables, ni escritorios… ¡Todo no creíble!… No hay explicaciones racionales. Los bomberos y el ejército están a cargo. Solo el gran tapial quedó en pie, pero con muchas grietas. Seguiremos informando”».

Comentarios (7):

Ebea

19/02/2025 a las 16:47

Hola Amadeo, aquí tu vecina del texto 50, pasando a comentar tu aportación. Curiosamente, ambos nos decantamos por la ficción y hablamos de entes brillantes en nuestros relatos, pero considero tu trabajo bastante mejor que el mío.

Tal y como ya les dije a los otros compañeros en sus respectivos textos, me siento un poco oxidada después de tanto tiempo sin participar en los talleres. Espero darte un buen comentario que te resulte útil y constructivo; lo haré con la mejor intención posible.

Comienzo dándote la enhorabuena. El relato me resulta genial, intrigante y fácil de leer. Además, creo que no solo has superado el reto adicional sin género de dudas, sino que me has dado mucha envidia, pues has logrado justamente lo que yo pretendía en mi relato: una atmósfera misteriosa y unas descripciones muy vívidas con un lenguaje para nada rebuscado… vamos, sin que diese la sensación de que el Sr. Spock estaba dando el parte de la misión.

En definitiva, un buen trabajo.

Si debo reseñar algo en especial, es que me gusta mucho la musicalidad que tiene tu texto en la lectura. Bueno, es cierto que he tenido que releerlo varias veces para añadir pausas donde lógicamente irían las puntuaciones, pero en general me resultó que se leía de un modo fluido, suave, agradable y con cierto ritmo muy apropiado para el desarrollo del relato. Por ejemplo, en “La rajadura tenía forma de una ese acostada, ondulada como una serpiente enorme, donde en una parte, la rajadura era profunda y sin el revoque y por allí se filtraba la luz proveniente del gigantesco cartel de la fábrica,” es muy agradable el efecto que da al leerlo en alto, sobre todo, creo yo, “ondulada como una serpiente enorme”. Luego, en “Tras un momento de silencio e inmovilidad total escuché, a través del paredón, una muy breve pero potente vibración aguda,” la pausa en la lectura le da impacto a lo que está contando, pero a la vez aporta una fluidez natural, creo yo.

Tiene algunos errores ortográficos bastante comunes: algún acento de más o de menos que se cuelan, alguna preposición que considero que no encaja, y la puntuación, como ya dije antes, sobre todo la gestión de puntos, comas y punto y coma. Desde luego, tampoco es que sea la persona más adecuada para criticar eso, ya que me suceden los mismos fallos; por mucho que repase el texto, me los como, pongo demasiados, no sé dónde encajan mejor. De hecho, si tuve que releerme el texto varias veces, fue por mi propia culpa, para buscar el lugar adecuado de las pausas.

Para ser sincera, te felicito. Siento que has logrado con cierta facilidad lo que con mucho esfuerzo no pude lograr yo, aunque sé que seguramente sea una percepción errónea. El relato tiene misterio, la atmósfera creada con las descripciones detalladas no solo físicas sino también sensoriales, introduce muy bien la fantasía de los entes parlantes. El narrador testigo encaja muy bien en todo el relato, todo es completamente coherente y bien engranado. Y al llegar al final creo que está muy bien presentado, con la desaparición de la fábrica, creando impacto en el lector y un cierre de la historia muy satisfactorio.

¿Qué puedo añadir? pues nada, un saludo y que tengo ganas de continuar leyendo tus trabajos.

Codrum

20/02/2025 a las 13:58

Hola, Amadeo.

!Menudo análisis te ha hecho Ebea!
Sin quitar mérito a tu texto.

Creo que estoy muy de acuerdo con ella. No sé cuantas palabras has usado, pero el texto se me hizo corto. Estaba muy interesado en saber que ocurría detras de esa grieta en la pared.

Has hecho un buen trabajo de misterio y fantasia.
Me gusta como has descrito el modo en que se acercaba a la pared para mirar y escuchar. La imagen se formó muy fácil en mi cabeza.

!Buen trabajo!

Yvonne (María Kersimon)

20/02/2025 a las 20:44

Hola Amadeo,
Tremenda historia de misterio. Me ha tenido en vilo hasta el final y aún me pregunto qué tipo de extraterrestres secuestaron la fábrica. Me gustó el lenguaje inventado, que mal que bien da pistas de lo que planean hacer…
Saludos.

Fernando Rodríguez

21/02/2025 a las 18:25

Todavía estoy intentando buscar la grieta para asomarme yo y ver esos bichitos, pero claro, si ya se han ido con la fábrica, difícil va a ser. Un poco más en serio, una historia bien llevada y que, gracias a que para eso somos quienes escribimos, la llevamos donde queremos. Tu has dejado volar tu imaginación y las instalaciones, pero a lo largo del texto pensaba que nos iban a colonizar. Entretenido y sin que se puedan destacar fallos, que es posible los haya, pero para eso seguimos en la brecha

Codrum

22/02/2025 a las 16:36

Hola Amadeo. Colaboraste mucho. Gracias por pasarte por el 40.
Mi texto falla bastante. Así que habrá que trabajar más para la proxima.

María Jesús

23/02/2025 a las 16:45

Hola Amadeo: muy interesante tu historia, intrigante y fantástica. Me quedó por saber de qué era la fábrica Brinig S.A para despertar el interés de los alienígenas.
Buen trabajo.
Saludos.

Thiagotrescuartos

26/02/2025 a las 13:27

¡Muy chulo el relato!

Una fábrica de trabajadores alienados (guiño, guiño) que en realidad son alienígenas. Muy gracioso 🙂

¡Nos leemos!

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