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Ya queda poco - por KyaneosR.+18
Crónica estaba muy enferma. Desde hacía mucho tiempo que sabía que su enfermedad era mortal. Pese a que era joven nunca quiso tomar ningún tipo de medicación para retrasar su mal. Sabía que era el destino. Su hora estaba escrita desde el primer momento.
Allí se encontraba. En el jardín trasero de su casa mirando a una lápida sin nombre mientras que la plaga de su cuerpo la corrompía cada vez más..
Cronica había sido la actriz más talentosa de su generación. Su fama creció como la espuma. No solo tenía talento, también misterio. Su historia personal de fantasía. Salía de la nada. Nadie sabía de ella. No había estudiado en ninguna escuela de arte dramático. Y de un día para otro todo el mundo estaba hablando de la nueva estrella del medio. Como es lógico su vida pegó un cambio, de repente se vio envuelta en un ambiente de dinero, vestidos elegantes, zapatos caros y alfombras rojas.
Cada trago de champagne sabía a hiel. Cada sonrisa era más falsa que la anterior. su mirada más vacía. Cada lágrima que caía en el set de rodaje era real. Crónica no era la mejor por talento, era la mejor porque siempre estaba actuando. Siempre estaba fingiendo ser una persona que no era.
Hace años, la familia Lewulff era una adinerada familia de la ciudad. Se dedicaban a la industria del hierro. A través del sudor de sus trabajadores forjaron una fortuna a yunque y martillo. Tenían dinero. Tenían poder. Tenían influencia. Y acababan de tener dos niñas preciosas. Dos hermanas gemelas, casi idénticas. Lucrecia y Crónica.
Con el tiempo el parecido de ambas no hizo sino crecer. Estatura, peso, proporciones. Eran como si una fuera el reflejo de otra. Pero Crónica no era buena persona. No estaba dispuesta a compartir la herencia de su padre. A través de artimañas consiguió que en el testamento solo estuviera su nombre.
Lucrecia condenada al exilio, vagaba por las calles. No tenía lo que siempre le había sobrado. Su archiconocido apellido solo le valía para ganarse el desprecio de la poca gente que le ofrecía trabajo. Al fin y al cabo ¿Cuántas veces puedes humillar a la hija de la persona más poderosa de la ciudad?.
Cuando estás en lo más bajo, solo se puede ir a mejor. Lucrecia rápidamente medro, su carácter cambió y creó en lo más profundo un rencor que arrastraría toda la vida. Conoció a gente que hacía ciertas cosas: Matar, falsificar, hacer que alguien no existiera. Eso llevó a Lucrecia a crear un plan. La muerte sería una cosa suya. Quería sentir el placer de la venganza. Lo otro seria cosa de otra gente.
Era una noche sosegada, el viento soplaba con tranquilidad y frescor. Las ventanas abiertas. El buen aroma de un jardín cuidado en una parcela alejada. Y una escopeta encañonada en la nuca de Crónica. Ni lloros, ni súplicas. Un disparo de rencor que le voló los sesos a una de las gemelas. Lucrecia nunca se arrepiente. Estaba lista para tomar el lugar que le pertenecía.
Enterró su nombre junto a su hermana. La tierra no hace preguntas. La piedra tampoco. La gente tampoco.
Lucrecia enfermo. Lo considero justo después de todo. Un cáncer por una vida. Era un trato de oro. Miraba la lápida, sin nombre. El cuerpo probablemente devorado por los gusanos y el tiempo.
― Ya falta poco ―. Mientras sonreía de verdad por primera vez en años
Pero lo que Lucrecia no sabía era que “no quedaba poco”. Metros atrás, arriba en la habitación donde Crónica había derramado su sangre hace tantos años ahora yacía otro cadáver.
Comentarios (4):
Beyna_nube
18/11/2024 a las 12:48
Enhorabuena, Me ha gustado mucho la trama, es interesante la historia de las gemelas y lo diferentes que son. Te deja con las ganas de seguir leyendo que eso para mí punto de vista es fundamental.
Amadeo
18/11/2024 a las 20:06
Kyaneos. Interesante trama sobre la envidia y el poder, entre las gemelas.
Mis observaciones:
1.- En varios tramos encontré cacofonías. Por ejemplo en: No solo tenía talento, también misterio. Su historia personal de fantasía. Salía de la nada. Nadie sabía de ella. No había estudiado en ninguna escuela de arte dramático.
2.- Repeticiones cercanas de palabras. Por ejemplo en: Cada trago de champagne sabía a hiel. Cada sonrisa era más falsa que la anterior. su mirada más vacía. Cada lágrima que caía en el set de rodaje era real. Crónica no era la mejor por talento, era la mejor porque siempre estaba actuando. Siempre estaba fingiendo ser una persona que no era.
3.- Un exceso de frases muy cortas.
4.- Creo que es opinión de autor (y no debería constar): Cuando estás en lo más bajo, solo se puede ir a mejor.
Espero haber colaborado. Saludos
¸.•*´¨`*•.¸Yoli¸.•*´¨`*•.¸
20/11/2024 a las 20:27
Hola Kyaneos (Jesús López), gracias por tu visita a mi relato, ahí te dejé el resumen al cabo suelto que me consultas 🙂
Del tuyo encuentro:
– repites 8 veces Crónica en un texto corto.
― Ya falta poco ―. No hay que dejar espacio entre el guion de diálogo y la letra siguiente, lo mismo el segundo guion, que va pegado a la letra.
― Dices participar en el reto: “En la lápida no había ningún nombre”, no encuentro esa frase completa.
– El último párrafo no me queda claro: “Metros atrás, arriba en la habitación donde Crónica había derramado su sangre hace tantos años ahora yacía otro cadáver.”
además que me parece le falta coma en años, entiendo como que Crónica mató a su padre? Y ahí mismo, el otro cadáver que yace es el de Crónica?
Otros mejorables ya te los han mencionado.
Gracias por permitirme aprender con tu escrito.
Nos seguimos leyendo.
Ed Gorende
26/11/2024 a las 07:48
Hay alguna puntuación incorrecta (“su” en minúscula tras punto, “medró” y “consideró” sin acento). El estilo me gusta (es similar al mío en ritmo, estructura y cadencia). El tema de gemelas idénticas esta bien pero ya muy usado, con lo que el desarrollo se vuelve predecible, y el doble giro final resulta confuso. Buena intención en todo, pero un resultado final que queda flojo pero promete grandes mejoras en relatos subsiguientes.