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Las verdades duelen - por bebaR.
Ahora, fue no. Ya no valía su belleza.
Los gestos del rechazo le dolieron como dagas. Su desconcierto la arrojó, como un ascensor averiado, hasta el fondo de sí misma: una cueva desconocida y oscura donde se agitaban dinosaurios amenazantes.
«¿Qué soy yo?»
Espantada, huyó hacia el pequeño rayo de luz, en busca de su imagen rota.
Asomó a la playa; el mar se estremecía en olas furiosas.
Una de ellas le echó la respuesta a los pies: una caracola enorme, labrada en curvas multicolores; pero totalmente vacía, muerta.
Lloró. Las verdades duelen.
Comentarios (24):
JUANA MEDINA
17/06/2019 a las 18:55
Bravo Beba,
Siempre sutil y con mucha belleza.
Un abrazo, compañera
IreneR
17/06/2019 a las 20:55
Buenas, beba.
Un relato lleno de imágenes. Me ha parecido muy triste, pero bien llevado, y las palabras del reto no quedan demasiado forzadas.
Nos leemos.
Un saludo.
Josè maría
17/06/2019 a las 21:36
Hola Beba buen relato corto algo dificil de conseguir con el reto ,un saludo ,tu vecino de arriba
Servio Flores
17/06/2019 a las 23:50
¡Hola Beba!
¡Que poético, que metafórico!
Este relato está en el filo entre el cuento y la poesía.
Bien hecho Beba.
P.d. si puede pase por este cuento, es de mi hijo. De antemano gracias.
https://www.literautas.com/es/taller/textos-escena-62/10887
Pia Daría
18/06/2019 a las 00:39
Hola Beba, compañera, como me gustó tu historia, genial, buen uso del reto, nada que aportar. Tus letras dicen tanto en tan poco y con los micros lo demuestras. Ya me contarás que te parece mi dinosaurio, te espero con impaciencia. Un beso
Héctor
18/06/2019 a las 05:23
Sabes Beba, me has impresionado; esa forma impecable, precisa y no violenta de incluir las tres palabras del reto en n micro tal hermoso. Literauta 44
Tulipán Magenta
18/06/2019 a las 11:12
Hola Beba, muy bello tu relato lleno de metáforas, e imágenes literarias. Percibí el lenguaje de la poesía.
Mi sugerencia mejorable: Trabajar lugares comunes.
Hasta pronto,
soy Tulipán Magenta 146
Carla Daniela
18/06/2019 a las 20:01
Hola Beba!
Que tremendo texto. Me gustó mucho como diste lugar a las palabras del relato, y como usaste las metaforas en tan pocas palabras. Si no estoy de acuerdo, que cuando la belleza ya no vale, signifique estar muerta por dentro. Ojala ella lo pueda ver!!!
Un gran saludo y nos leemos (N°100)
Patricia Redondo
18/06/2019 a las 22:17
Muy hermoso Beba.
Felicidades
Nos leemos!
Poros y Penia
19/06/2019 a las 16:53
Hola Beba.
Excelente microrelato. Muy bien reflejado lo efímero de la sobrevalorada belleza, y lo vacío que deja el interior si has vivido para ella.
Bien incluidas las palabras del reto, aunque éste mejoraría cambiando dinosaurios por otras figuras.
En mi humilde opinión, el relato merece que en la frase “Una de ellas le echó la respuesta a los pies”, hubieras utilizado otro verbo (arrojar, lanzar…) más literario.
Un saludo
María Jesús
19/06/2019 a las 20:03
Hola Beba: ¿Quien rechazó a esa pobre mujer para dejarla tan abatida?Me ha parecido un micro de una tristeza infinita. Parece que la protagonista pierde la belleza y con ella la ilusión, pero creo entender que ella es rechazada, de ahí ese sentimiento de no valer nada.
Muy bello.
Saludos desde el 142.
Ryan Infield Ralkins
20/06/2019 a las 04:23
Saludos Beba
Cómo y te dijeron en los comentarios,es un cuento muy poético, lleno de imágenes que son perfectamente imaginables.
Me parece una historia triste pero narrada de forma perfecta, es atrapante de principio a fin.
Felicitaciones
Vespasiano
20/06/2019 a las 19:23
Hola beba:
Relato impactante que refleja el daño anímico que puede provocar en una persona sensible, el rechazo y el desprecio provocado por alguien que se supone debería respetarla y quererla.
Me ha encantado.
Pasaré con el mayor respeto a señalarte un par de cosas que me han parecido oportunas, por si pudieran servirte de ayuda, sino échalas a la papelera.
“Ahora, fue no”. Creo que ese “no” podría ir entre signos de admiración para dar más énfasis a la frase: “Ahora, fue ¡no!”.
“Los gestos del rechazo le dolieron como dagas”. Pienso que podría ser: “Los gestos del rechazo se le “clavaron” como dagas”.
Enhorabuena por tu relato.
Nos seguiremos leyendo. Felicidades.
Beatriz Emilia
21/06/2019 a las 11:09
Hola Beba,
No deja de admirarme cómo en tan pocas líneas puedes contarnos tanto acerca del dolor ante el rechazo de alguien que nos ama. Las imágenes son poderosas, en especial me gustaron las del ascensor hacia el vacío y la caracola vacía.
Nos seguimos leyendo. Te espero por mi relato.
¡Un abrazo y me admiración!
Isabel Caballero
21/06/2019 a las 19:56
¡Hola Beba!, un ejercicio introspectivo con imágenes alegóricas y bellas. Un contraste con el devenir de la mujer depresiva y presionada de tu micro, y además, con las palabras engarzadas con naturalidad.
Te felicito compañera. Hasta pronto.
Ana Roda
21/06/2019 a las 23:05
Hola Beba.
Lo primero gracias por tu visita a mi relato.
El tuyo me ha gustado mucho. Es muy visual y poético.
Su lectura despierta muchas emociones.
Enhorabuena y hasta la próxima convocatoria.
LectVerd
23/06/2019 a las 09:30
Hola beba:
Concuerdo con muchos, al decir que utilizas las tres palabras del reto tan fluidas y a la vez tan metafóricamente acertadas.
Es un texto que transmite mucho sentimiento, tal vez de tristeza, pero a fin de cuentas lo transmite y eso pocos lo logran.
Vespasiano ya mencionó los detalles a revisar, así que sobra si yo menciono alguno. En lo personal, me gustó mucho. Y te invito a echarle un vistazo al mío- #99. Suerte y nos leemos.
Luis Javier Kendall Callieri
23/06/2019 a las 12:15
¡Magnífico! Recursos utilizados de forma impecable, con el aliciente añadido del respeto absoluto al lector, sin guiños, trampas o sorpresas.
Gracias por compartir
Osvaldo Vela
24/06/2019 a las 17:33
Hola beba.
Tu trabajo del mes lo leí desde la primera tarde y me pareció tan hermoso que preferí castigar mis ganas de comentar para regresar después y gozar de la misma admiración que yo siento y que los compañeros literautas han plasmado.
las letras deben de ser como los trazos de un pintor que llena un cuadro lleno de luz donde cada admirador ve esa iluminación de diferente manera.
Vaya que tu tintero es inmenso, y es poético, y es sutil y hermoso. Tu pluma, además, sabe acomodar cada letra de cada palabra para que así llene nuestra necesidad de algo tan bello. las metáforas no son casualidad, ellas conjugan los mismos verbos que tus vivencias.
Te felicito y admiro.
Un abrazo.
María Esther
24/06/2019 a las 23:18
Hola Beba muy bien llevado tu micro, con lenguaje sencillo y metafórico. Logras concretar una historia en pocas palabras provocando emoción.
Concuerdo con Vespasiano en la sugerencia de cambiar algunos vocablos.
Saludos, espero tu visita en el 36.
Shulitos
25/06/2019 a las 20:06
Hola Beba,
Te felicito por tu relato, triste y melancólico. En un poema íntimo y emotivo. Muy bien integrado el reto.
Nos leemos,
Un saludo,
el chaval
26/06/2019 a las 17:18
Hola Beba
Gracias por tus amablaes comentarios, y sobre todo en tu descripción sobre la coma en Dimas Ojeda. Creo que si está bien puesta. Triste tu relato cuando la vida psaa tan deprisa.
La mente se temndría que ir deterirando al mismo tiempo que el cuerpo. Te feliocito
Un cordial saludo y hasta la próxima
Charola
02/07/2019 a las 22:23
Hola, Beba.
Muy bueno tu texto. Me encantó. Al inicio no entendía esta oración: Ahora, fue no.
Estoy de acuerdo con Vespasiano, ese “no”, debería ir con fuerza.
Gracias por regalarnos una belleza de micro, aunque triste.
Felicitaciones.
K.Marce
17/07/2019 a las 05:24
Saludos, Beba
Gracias por pasar por mi relato, pese a que estemos “fuera” de tiempo, siempre se agradece la visita y tu gentil comentario.
Como no sé si has dejado reposar tu trabajo o si ya lo has enviado, no quisiera dejarte ninguna mejora; pero sí, dejarte mi respeto por la pluma tan sútil que muestras siempre.
Siento mucha tristeza que algunas personas sean crueles con otras, y éstas permitan que las acciones o palabras los hieran profundamente.
A mi parecer envejecer es una bendición, que no debería causar ni tristeza, ni nostalgia. Es la acumulación de muchas experiencias, cada una valiosa aún si fue tropiezo; y la vida siempre te muestra un lado amable, ese que sonríe.
Mientras lo leía, pensaba cómo podía sentirse tan desanimada frente a un océano, vasto, hermoso y potente. Quizá solo pensando en aquello que ya no volverá a tenerse. Pero, en mi mente, talvez no hoy, quizá mañana ella levante cabeza y se sienta orgullosa, enérgetica y ¡Viva!
Pecado el mío que me resisto con todas las fuerzas al fracaso, a la desesperanza o al No Puedo. Quizá porque mi madre siempre repetía «Mientras hay vida, hay esperanza».
Conmovedor…
¡Nos leemos!