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LA CIUDAD NO ES PARA MÍ - por isanR.
Web: https://unacapadebarniz.blogspot.com
Mi vida transcurría apacible en el solaz del pueblo. Hasta que ocurrió aquel encontronazo. Soy de campo, lo cual considero un regalo del destino. Tengo todo lo necesario: una madre que se desvive por mí y sin ella no sé si me apañaría; el curro en la cooperativa; la cuadrilla que conoce mis más memorables momentos de juerga siguiendo rigurosamente el calendario de fiestas de los pueblos del entorno, y el bar de la plaza que me proporciona la mejor medicina en forma de bebistrajos. También está Snoopy. No caza pero me acompaña en los paseos por el monte. Este es mi mundo. Cuando quiero viajar pongo el canal de “National Geographic”: no madrugo, estoy cómodo y no me pican bichos raros. En cuestión de novias, me arreglo con Internet. No necesito más.
Los amigos siempre me hablaban de las maravillas que se podían encontrar en ese gran establecimiento del centro de la capital. Una tarde, picado por la curiosidad pero no convencido, cogí el autobús y me acerqué con intención de husmear de qué iba aquello y comprar, si se terciaba.
Estaba frente a la puerta del local contemplando alelado la altura del edificio, cuando un chaval, al descuido, me levantó la cartera. Se echó a correr al interior de los almacenes como alma que lleva el diablo. Una llamarada de indignación inflamó mi sesera. Pensé que el mocoso podría ser más rápido, pero no más listo. Naturalmente me lancé tras él. Tiró para arriba por unas escaleras abarrotadas empujando sin miramiento. Opté por coger las de al lado ya que, extrañamente, se encontraban vacías. En un principio, cegado por las ganas de atraparle, no me fijé en su movimiento descendente. No obstante, calculé que, al encontrarse las mías expeditas, me daría la ventaja suficiente como para atraparlo arriba. Subí precipitadamente los dieciséis escalones sin perder de vista la escalera lateral. Al llegar al último, apareció como por encanto del propio suelo uno más con el que no contaba. Provocó que mi pie no tuviera la paciencia requerida para asentarse como es debido. Tropecé y, después de realizar alguna cabriola, quedé por unos instantes suspendido en el aire cual funámbulo que ha perdido el equilibrio dibujando figuras imposibles y sin decidirme si a izquierda o derecha. Con más rapidez de la que había subido empecé a bajar. Uno a uno fui besando los peldaños hasta contar diecisiete, lo cual me induce a pensar que en uno de ellos repetí beso o, quizás, el sobrante era el que a última hora se incorporó a la danza. Terminé la actuación haciendo el espagat y con los brazos en jarras. Si no fuera por la abundante sangre que manaba de la nariz y porque el momento no se prestaba a ello, me habría arrancado con una jota.
Todavía no me explico cómo terminé mi meteórico descenso con un bolso de señora en la mano. Al tomar tierra me estaba esperando el guarda de seguridad, quien, como león hambriento en medio de la sabana, lanzó sobre mí cien kilos largos de masa muscular. Le costó lo suyo arrebatarme el bolso ya que, aturdido como estaba, lo tenía fuertemente asido. Después del forcejeo, bastó con que me diera un pisotón en la mano hecho con la parsimonia de quien pisa una cucaracha recreándose en el sonido que producían mis nudillos. Dolió y mucho.
Tardé algún tiempo en tomar conciencia de cuanto ocurría. Me encontraba expuesto al escarnio de quienes se arremolinaron alrededor. Gente de escasas luces que disfruta con el mal ajeno y se refocilan porque a ellos no les pasan estas cosas. Lo cual demuestra que a esas molleras les falta una patata para el kilo. Allí estuve como un estafermo, mirando a cuantos me rodeaban, sin saber qué decir o hacer. No tenía coartada y me temía lo peor.
Alegó quien se presentó como propietaria del bolso que se lo había arrebatado de un tirón. Que en mi huida había tropezado y caído escaleras abajo:
—Ya noté algo raro cuando le vi subiendo a contra corriente con esas pintas de garrulo. Por eso no me había decidido a bajar. Si no hubiera soltado el bolso, ahora no estaría contándolo —terminó diciendo.
Por fortuna la susodicha no puso denuncia, quizás al apiadarse de mi lamentable estado. Del chaval que se llevó mi cartera nadie dio fe. Ni siquiera me creyeron. Dijeron que era una burda excusa.
Cuánta razón tiene mi santa madre cuando dice que el mejor comercio es el de proximidad.
Continuará…
Comentarios (73):
Josè maría
16/05/2019 a las 18:13
Hola Isan, buen relato quizás un tercer párrafo un poco largo por lo demás bien y como sabes que no suelo corregir la ortografia y gramatica lo dejo a los compañeros.Mi relato es el 43 por si quieres pasarte.
Josè maría
16/05/2019 a las 18:43
Por cierto “en el solaz del pueblo” creo que encaja mejor “en el solar del pueblo”
isan
16/05/2019 a las 19:28
Hola José María:
Gracias por tu rápido comentario. Ese párrafo parece difícil cortarlo por algún sitio ya que se trata de una sola acción que pretendo que sea rápida.
Respecto a “solaz” este es su significado:Consuelo, placer, esparcimiento, alivio de los trabajos. (RAE)
Te visitaré pronto. Un saludo
marazul
16/05/2019 a las 19:37
Hola Isan: sabes que soy fan del Isan cómico. Ya se que puedes escribir grandes dramas si te lo propones je,je… pero tienes una vena cómica que engancha. Siempre se ha dicho que es más difícil hacer reír que llorar. Yo así también lo creo.
Has creado un personaje entrañable y “alelado” como tú bien dices. Ese contraste, entre la simplicidad del hombre de campo y la modernidad de la ciudad funciona. La escena de la escalera es cómica. Me he reído de veras con la escena de las escaleras mecánicas.
Lo que dice nuestro compañero José María de la palabra “solaz” creo que está muy correcta ya que se refiere a la tranquilidad del mundo rural.
Un relato divertido y bien escrito.
Saludos
JUANA MEDINA
16/05/2019 a las 20:04
Isan, compañero,
Me gustaría poder filmar esa escena de la escalera mecánica. Pienso que Chaplin o Buster Keaton habrían sido los actores perfectos para ella. Excelente ritmo y perfecta descripción de un personaje que nos hace reír pero que asimismo nos despierta la ternura inmediatamente.
Un aplauso y un abrazo
isan
16/05/2019 a las 20:52
Gacias Marazul. Es un honor tener un fan como tú. Este personaje, ya lo anuncio con el “continuará”, saldrá en la primera ocasión que encuentre porque me lancé a escribir y la historia sigue jugosa.
Un saludo y gracias de nuevo.
Baxin
16/05/2019 a las 22:40
Me encantó la descripción de la atmósfera, con los detalles necesarios para imaginarla escena, sin saturarla. Sólamente no entiendo las palabras “arrancado con una jota” y “sesera”. 🙂
Carla Daniela
17/05/2019 a las 01:07
Hola Isan! Como estas?
Debo admitir que vi tu nombre y vine corriendo a leerte. Y por suerte, no salgo decepcionada.
Me resultó muy cómica la historia. Alejando un poco de lo que genera, me pareció muy buena y muy bien escrita, palabras bien seleccionadas (Algunas no conozco y otras ni se me hubieran ocurrido) una historia bien ambientada y un personaje bien presentado. Me dio mucha risa lo de las novias y el Internet. Y ni hablar de como tu bueno e inocente personaje, terminó siendo el “malo”. Menos mal que vas a seguir con el, porque tiene un lindo potencial.
Mi única pregunta es: ¿Después de los “:” o “;”, no va una mayúscula? Ahhh y otra, me sumo al comentario de Baxin, que seria una “jota”?
En fin, aprendí con el texto y es un gusto. Un gran saludo, y nos leemos!! (Nº 47)
Luis Duque
17/05/2019 a las 01:59
Hola Isan.
Atmósfera fluida, con ritmo y cautivante, pero siento que el uso de localismos llega a romper con el ritmo que logras generar al no entenderse lo que significa. Eres un capo. Felicitaciones.
Beba
17/05/2019 a las 05:17
Hola, Isan: Un cuento ágil y ocurrente que no tiene”peros” Muy buen manejo del humor.
isan
17/05/2019 a las 08:38
Hola Baxin:
Respondiendo a tus dudas. Arancando con una jota quiere decir empezar a cantar una canción, la jota, que se canta en muchos lugares de la Península Ibérica y que, entre otras características, se canta con los brazos en jarras. La sesera se refiere a la cabeza, donde están los sesos.
Te agradezco la visita a la que corresponderé.
Un saludo.
isan
17/05/2019 a las 08:50
Hola Carla:
La mayúscula se pone después de punto. Después de interrogación o exclamación, si queremos cerrar la frase, se pone mayúscula, pero podríamos poner minúscula según queramos que la frase continúe. En cuanto a los dos puntos y el punto y coma siempre la siguiente palabra va en minúscula a no ser que se trate de un nombre propio.
La jota es un tipo de canción tradicional que se canta en algunos lugares de la Panínsula Ibérica.
Un saludo.
isan
17/05/2019 a las 08:58
Hola Luis:
Quizás la JOTA no sea muy conocida, pero esa y todas las demás palabras están en el Diccionario a excepción de “espagat”.
Lo de capo te lo acepto pero no lo merezco.
Saludos.
isan
17/05/2019 a las 09:00
Hola Beba:
Gracias por tu comentrio positivo. Te devolveré la visita.
Un saludo.
Galia
17/05/2019 a las 13:35
Buenos días Isan: aún me estoy riendo de tu relato y por cierto ansiosa por saber cómo continúa. Me sentí identificada con el personaje ya que vivo en zona de sierras , a treinta km de Córdoba, Argentina y siento lo mismo que él cuando por un motivo muy especial debo ir a la ciudad, ni hablar del estado de pánico que me produce entrar e un populoso centro comercial. Calculo que me pasaría lo mismo.
El desarrollo del relato impecable y las descripciones pintan lugares y acciones con una fluidez cinematográfica.
Nos seguimos leyendo.
Saludos
Galia
Otilia
17/05/2019 a las 14:39
Hola Isan:
De nuevo nos encontramos, después de varias escenas sin comentar, que no, sin leer.
Has escrito, muy bien, una divertida historia que rezuma ese humor irónico que dominas. Buen trabajo.
Por aportar algo, he visto que has utilizado varios adverbios terminados en “mente”, como sabes, dicen que empobrecen el texto.
Nos leemos. Saludos.
Beatriz Emilia
17/05/2019 a las 16:59
Hola Isan:
Me encantó tu relato, ágil y divertido, amé la escena de las escaleras y la confusión que originó el protagonista terminara siendo un ladrón.
Te invito a pasar por el mi relato, también eres una aguda lectora.
Nos seguimos leyendo.Un abrazo
Poetajc
17/05/2019 a las 17:22
Hola isan
Tu relato me ha gustado, quizá la escena de la escalera se podía haber desarrollado mejor, pero es solo mi punto de vista. Y lo que no me ha gustado nada, y eso que tenemos un diccionarios de palabras y sinónimos muy variado, es que utilizas palabras muy raras y que frenan la lectura o me hacían dudar de lo que realmente querías decir o describir.
Véase:Solaz, bebistrajos, sesera, expeditas, estafermo…
Soy Poetajc (12) un relato un tanto loco pero con mucho humor te invito a leerlo.
Poetajc
17/05/2019 a las 17:22
Nos leemos. Saludos
isan
17/05/2019 a las 17:34
Hola Galia:
Si tú te sientes identificada será que no lo he hecho mal, así que me quedo satisfecho. La segunda parte veremos cuando llega, no siempre será posible.
Gracias por comentar.
Saludos.
isan
17/05/2019 a las 17:39
Hola Otilia:
Ciertamente que no nos comentábamos ultimamente aunque te tenía en mente (este no vale). No me había dado cuenta de la repetición. Es algo que suelo repasar, menos esta vez.
GRacias por pasarte. Te devolveré la visita.
Un saludo.
isan
17/05/2019 a las 17:41
Hola Beatriz:
Seguro que me pasaré a leerte y comentarte, tal vez tarde un poco porque se me acumula el trabajo.
Gracias y yb saludo.
isan
17/05/2019 a las 17:53
Hola Poetajc:
Reconozco que tengo cierta tendencia a usar ciertas palabras no tan de uso común. Podría cambiar todas las que señalas aunque perdiera el matiz que las puestas tienen, pero no cambio el estafermo, palabra que he oído desde pequeño y que le va a la escena de maravilla.
La composición de la escena de la escalera admito que es mejorable.
Me pasaré a comentarte. Gracias por tus consejos.
Saludos.
Isabel Caballero
17/05/2019 a las 18:15
Buenas tardes Isan. Has sido mi primer comentarista, te lo agradezco.
¡Vaya! Veo que tienes ya 23 comentarios y eso que acabamos de comenzar, ¡pues sí que tienes poder de convocatoria chico!, aunque seguro que es correspondencia puesto que sueles hacer críticas asertivas y acertadas, y eso se agradece, por supuesto.
Vamos a por LA CIUDAD NO ES PARA MÍ.
Está escrito en clave de humor y en primera persona. El sujeto se conforma con la vida tranquila que tiene y no desea nada más. Aunque resulta extraño en un muchacho que se le presupone joven, no sentir curiosidad por lo que ocurre fuera de las fronteras del pueblo,(en una persona mayor sí que suele ocurrir).
Una comedia entretenida, como tiene continuación me gustaría saber como se las compondrá el patoso pueblerino con una chica de ciudad. No me lo pienso perder 🙂
Hasta pronto compañero.
Mario Fernández
17/05/2019 a las 18:44
Hola, Isan.
Coincido con todos los elogios de los compañeros. Me gustaría resaltar la forma en la que reflejas la visión que tiene el protagonista de los habitantes de ciudad, de escasas luces y faltos de patatas. Todo ello mientras trata de entender qué es lo que esas malévolas escaleras tienen contra él.
¡Gran trabajo!
Mario (71)
Karen
17/05/2019 a las 19:11
Hola Isan
Me gustó tu relato, me quedé con ganas de leer más pero te sugiero que seas más breve, es decir, me perdiste un poco en la parte de la caída de las escaleras, corta un poco y tendrá más fuerza la acción.
Alex
17/05/2019 a las 19:59
¡A la izquierda del cuadrilátero….; con calzón de pana y boina a rosca…; nuestro campeón en levantamiento de arado, el terrooooor agrícola deeel valleee, el Belcebú de la siembra, la pesadilla de los garbanzos, el graaan, el úuuunico, el inigualableeeee…..:
¡IIIIIIIISAN!
Cierro los ojos y veo a tu Macario con los labios apretaditos besuqueando los fríos escalones de hierro. Es como si una viñeta de El Jueves hubiera cobrado vida.
Me he reído mucho con el trompazo por fascículos que se pega nuestro amigo. Tienes una forma de contarlo que es única.
Mas allá de varias pinceladas de humor que escribes como pocos pueden hacerlo, hay un trasfondo sobre los prejuicios de la gente, sobre el propio miedo a “lo moderno” por parte del protagonista. Su sencillez, su dependencia en cierto modo de la madre, la vida tranquila y distante viendo NatGeo o la web marrana de turno. Los peligros a los que se enfrenta en la ciudad…
No sé si conoces las películas de Paco Martínez Sória, pero si no lo has hecho, tienes que ver alguna de ellas. Era un genio.
Vamos a por faena. Sobre tu texto:
He tenido que buscar solaz en el diccionario. Vale que yo no soy la leche en lo que a vocabulario se refiere, pero para escribir un texto sobre alguien sencillo, encuentro que has usado una palabra rebuscadita cuanto menos.
Los bebistrajos me encantan. También las copichuelas, los cubalitros y los chupitejos.
También me gustan los alelados. Tengo prediclección por ellos. Es más, ¡temo ser uno de ellos!
Por apuntarte algo que pueda sumar:
– Hay alguna frase que no me acaba de encajar por el verbo que has utilizado. Es correcta, pero tienen ese nosequé:
«Hasta que ocurrió aquel encontronazo.»
No quiero sugerirte que cambio hacerle, pero me suena rara. Es más, creo que la podría unir con la frase anterior en una sola y quedaría incluso mejor.
«Se echó a correr al interior de los almacenes como alma que lleva el diablo.»
Quizás sería mejor “hacia el interior”. También a modo de sugerencia: ¿Sería mejor usar “Grandes Almacenes”? Por que dan más la sensación de centro comercial. Cuando usas “almacenes”, parece referirse al lugar en el que se guarda la mercancía.
Eso es todo, espero aportar algo para mejorar y no como crítica.
Como siempre, un placer leer tu trabajo.
Alex.
isan
17/05/2019 a las 20:14
Hola Isabel:
Efectivamente es infrecuente que haya jóvenes que no salgan de su pueblo, pero “haberlos hailos”.
Respecto a las andanzas de Martín (no lo digo, pero así se llama), puedo decir que pasan cosas, como decía el otro.
Grancias por pasarte.
Un saludo.
isan
17/05/2019 a las 20:18
Hola Mario:
Es chico listo nuestro protagonista. Tiene esa agudeza innata que sabe por dónde van los demás.
Te devolveré la visita.
Un saludo.
kirjanik Maya
17/05/2019 a las 20:27
hola, Isan.
Gracias por tu visita a mi relato y como siempre con buena apreciaciones.
El tuyo ameno y fluido, coincido con un comentario anterior en cuanto a la extension del tercer párrafo, pero es algo mas de forma que de fondo, no desmérita lo bien logrado que esta tu relato. Llevo poco en el taller y no aún no he visto una continuación de un relato tuyo, como es costumbre quedamos atentos a tu próximo relato.
Saludos.
isan
17/05/2019 a las 20:38
Hola Alex:
Vaya presentación boxistica te has montado. Me alegro que hayas visualizado la escena. Conozco a Paco Mtnez. Soria. De hecho el título de mi relato es el una de sus películas. En principio le había puesto otro, pero lo cambié porque me pareció que ese le encajaba a la perfección.
Acepto lo de juntar las dos rimeras frases. Esta y algunas otras fui separando y juntando en función del momento en que lo leía.
Los Almacenes también lo cambié de Centro Comercial. Mi problema es que la mayoría de mis relatos tienen 750 palabras exactas y cuando hago el primer borrador tengo que ir suprimiendo palabras de aquí y allá y sintetizando, lo cual no me importa mucho por seguir los consejos del reciente tutorial de Anael.
Las críticas son buenas si entán fundamentadas y las tuyas lo son, así que te lo agradezco de verdad porque siempre enriquece.
Gracias por tu análisis. Me pasaré por el tuyo.
Un saludo
Pia Daría
17/05/2019 a las 21:49
Hola Isan, vaya pericia con las letras compañero. El párrafo inicial centrado en la descripción del protagonista es muy bueno. El ritmo de la historia consigue ir a la par de la rueda mecánica de las escaleras. Esa escena cómica es de cine, tiene unas descripciones muy buenas; me imagino la cara ensangrentada y las paletas partidas del pobre infeliz ¡a quién se le ocurre salir del pueblo! Veo que utilizas mucho el punto para darle ritmo al texto, sobre todo al párrafo más largo, pues oye, ese recurso es muy bueno, solo una sugerencia: creo que alguno podría ser sustituido por coma y el punto y aparte de “Dolió y mucho” no lo veo.
Soy nueva por aquí así que no se si la lectura va por orden de lista, yo he cumplido con mis tres compañeros siguientes a mi y ahora he comenzado por el primero ¿tienes enchufe? jeje, es broma, así que por si comienzas por el final, solo una sugerencia, hay un relato también divertido: “Los cinco días de un pulgar”. Ya me cuentas. Un saludo
marazul
17/05/2019 a las 22:13
Hola Isan, soy marazul otra vez. Ya te leí y comenté pero me vuelvo a pasar para leer los comentarios de los demás y los tuyos a tu relato. Creo que te vamos a nombrar el “ más popular de literautas”. Chico !qué capacidad de convocatoria!
Pues nada que buen finde. Igual, si me aburro, me vuelvo a pasar.
Chao
Carlos Jaime Noreña
18/05/2019 a las 00:48
Como fui el último esta vez, me toca comentar a los tres primeros.
Tu relato se lee con fruición, Isan.
Haces gala de gran imaginación y de una tremenda facilidad de escritura, con fluidez y con un bouquet que no queremos dejar de degustar.
Fino sentido del humor y elegante construcción.
Me parece que no hay ninguna observación gramatical para hacerte. Los términos “extraños” por los que te reclaman son castizos y ayudan a matizar la buena categoría narrativa. Me extraña que varios no conozcan el significado de “solaz”, un sustantivo que describe algo que tanto nos gusta y tanto nos falta.
Anoto que el DLE me dice “La palabra espagat no está en el Diccionario”.
Rafa Frisby
18/05/2019 a las 05:24
Hola Isan, lo primero que me enamoró del relato es el nombre del perrito, que es el mismo del mío, jeje. Ya entrando en materia, te cuento que me encantan los relatos que me hacen reír, y el tuyo lo ha hecho en mas de una ocasión. Me permito discrepar de la opinión de que cambies tu vocabulario, una historia debe llevar los tintes de su autor, según yo. Prefiero buscar en Google en cosa de nada el significado de algo que no entiendo bien, que querer que un cuento cambie su esencia.
isan
18/05/2019 a las 07:20
Hola Kirjanik:
Gracias por tu sugerencia, la tendré en cuenta.
Un saludo.
isan
18/05/2019 a las 07:32
Hola Pia Daría:
El recurso del punto está tomado de ls recomendaciones de Anael, compañera del taller y autora de un tutorial. Efectivamente da ritmo y muchas veces evita más palabras, algo que me viene bien.
En cuanto a la lectura de textos, la recomentación para que todos tengan su comentario es hacerlo a los tres siguientes al tuyo. Yo, además, leo y comento a quienes me comentan por riguroso orden y a algun@s que son fij@s. Lo de estar en primer lugar es una casualidad y es la primera vez que ocupo ese puesto.
Tomo nota de tu recomendación y leeré ese relato (después del tuyo).
Un saludo.
isan
18/05/2019 a las 07:40
Hola Rafa:
use un nombre de perro lo suficientemente conocido precisamete para no decir que tiene un perro. Me alegro que eso te haya enamorado. Las palabras que siempre empleo no las voy buscando, las conozco. Tenía un profe que insistía en leer con el diccionario al lado y eso sigo haciendo. Así que te agradezco el comentario.
Te visitaré en cuanto pueda.
Un saludo.
isan
18/05/2019 a las 09:44
Hola Carlos Jaime:
Me alegraque aceptes los términos menos usuales. Efectivamente “solaz” es lo que por lo general se respira en los pueblos en contraposición al ajetreo de la ciudad. La ausencia de espagat del Diccionario ya la apunté en algún comentario, pero me parecía lo suficientemente conocida.
Gracias por pasarte.
Nos leemos.
Lady N
18/05/2019 a las 14:16
¡Hola Isan!
Primero que todo agradecerte tu visita y tus correcciones. Y ahora sí, de lleno a tu relato.
Me ha gustado mucho tu forma de detallar y recrear ese mundo en el que vive tu personaje. Y también me ha causado ternura como miraba con ojos curiosos la ciudad y su forma de interpretarlo todo; la parte de las escaleras mecánicas inversas me ha hecho mucha gracia, un detalle muy bien hilado con ese escalón que aparece de la nada jajajjaja. (Lo que no sé yo, es si, después de tal caída por las escaleras tendría mucho animo para ponerse a conversar, yo creo que necesitará una buena visita al hospital.)
El único detallito que veo está al principio. Cuando estás enumerando todo lo necesario para él, empiezas separando los ítems con punto y coma, pero al final acabas la lista con coma más conjunción y personalmente se me hace algo raro. ¿Está la parte del bar relacionada con las juergas? No sé, algo ahí me suena raro, quizás podrías darle una vuelta o quizás sea solo cosa mía (en ese caso mis mas humildes disculpas).
Por lo demás has creado un gran relato. Con un personaje, como dices algo alelado, pero con mucho encanto. Ojalá que continúe pronto su historia y podamos saber más de él y por supuesto; seguir leyéndote a ti.
¡Muy felices letras!
isan
18/05/2019 a las 16:11
Hola Lady N:
En primer lugar gracias por tu extenso comentario. Me alegro que te haya gustado la forma de detallar.
Respecto a tu objeción, te pongo un enlace de la FUNDEU (Fundación del Español Urgente). Es una página muy útil que aclara cualquier duda de gramática. También se pueden hacer consultas gratuitas. Verás que lo que he puesto es lo correcto. Te agradezco que hayas planteado la duda. No tienes que pedir disculpas. https://www.fundeu.es/recomendacion/punto-y-coma-uso-apropiado-1562/.
Un saludo.
Patricia Redondo
18/05/2019 a las 17:51
Magnifico relato ! Tiene de todo, acción, ironía, comicidad, un personaje redondo. Na deja con ganas de más sin duda alguna. Espero la continuación a esos puntos suspensivos. No me busques que este mes no participe, sin coartada.
isan
18/05/2019 a las 18:44
Hola Ptricia:
Lástima que no nos regales tu relato. La explicación (sin coartada) muy oportuna y, diría, convincente.
Un saludo.
Solidsteel
19/05/2019 a las 01:24
¡Hola, Isan!
Por segundo mes busco tu relato y por segundo mes encuentro esa frescura y comicidad que describen los compañeros…
Tu relato tiene un desarrollo magnífico, con un buen ritmo y no creo poder aportarte nada en lo formal.
A mi particularmente me encantan esas palabras que dan carácter a tus relatos y además, en este caso, dan realismo a tu personaje.
Lo único que veo raro es que pueda contar los 17 golpes que se da en la caída, pero es tan cómico que te lo compro… jajaja
¡Saludos y encantado de volver a leerte!
isan
19/05/2019 a las 12:52
Hola Solidsteel:
Por lo general los gags cómicos se basan en la exageración, donde se pueden admitr licencias literarias, así que gracias por aceptarlo.
Me alegro de que te haya parecido bueno el desarrollo y el ritmo.
Un saludo.
Ulises Vidal
19/05/2019 a las 22:33
¡Hola Isan!
Espero leer pronto más aventuras de personaje tan divertido.Lo has prometido.
Me ha gustado como logras el efecto cómico con el uso de determinadas palabras, podemos imaginar la escena como si la estuviéramos viendo en una película. ¡Felicitaciones!
Te invito a pasar por mi relato, el 113, me interesa tu comentario.
Nos seguimos leyendo. Hasta la próxima.
Ofelia Gómez
20/05/2019 a las 04:41
Hola Isan
Impecable relato el tuyo. Ha sido un gusto leerte.
Si bien estoy en Argentina y necesité averiguar por alguna palabra, en general han sido solo un par. Todo tu texto se entiende o sobreentiende perfectamente.
Pobre tu muchacho del campo que la está pasando tan mal, la ciudad no es para él, a veces tampoco lo es para los citadinos, doy fe.
Desde ya que, como muchos otros, quedo a la espera de la continuación de la historia.
Un saludo.
isan
20/05/2019 a las 08:04
Hola Ulises:
Por supuesto que me pasaré, ya te vengo comentando hace unos cuantos relatos.
Me alegro que te haya parecido cómico.
Un saludo.
isan
20/05/2019 a las 08:09
Hola Ofelia:
Creo que no hay que tenerle miedo a los nuevos vocablos, tanto leerlos como usarlos. Si no se abusa de ellos, lejor de parecer pedante, enriquece el texto.
Un saludo.
Osvaldo Vela
20/05/2019 a las 16:34
Ademas de buen escritor, has adquirido la sapiencia primordial de las letras: atrapar al lector.
Mira que con ese último párrafo de una sola palabra me dejas bajo encierro en una cárcel con barrotes de letras de no sé, quizá meses, en una espera que promete: continuará. Estaré al pendiente.
Un abrazo y saludos.
isan
20/05/2019 a las 17:07
Hola Osvaldo:
Mi último párrafo te deja bajo encierro, pero tu primer pérrafo me sube a mí a un lugar inmerecido. Acepto tus palabras como un halago porque eres un caballero. Gracias.
Procuraré liberarte de los barrotes en cuanto tenga ocasión.
Un abrazo.
JHONATAN VARELA
21/05/2019 a las 01:30
Me hubiera gustado que le final fuera diferente…Como que el personaje hubiera atrapado al ladrón y que por la rabia del momento, sin querer mato al ladrón, ahora el seria el malo del cuento.
SALUDOS PRROS ;V
Juan Esteban
21/05/2019 a las 01:48
Todo el cuento me gustó, hasta la parte del final donde me dejaste un poco aburrido debido a que el final queda muy inconcluso, esperaba màs del final ; me gustaría seguir leyendo tus obras gracias por ese cuento tan bueno.
isan
21/05/2019 a las 13:21
Hola Jhonatan Varela y Juan Esteban:
Como ambos plateáis el mismo deseo, os contesto a la vez. No siempre las cosas pueden salir como una desea. Quizás el convencimiento de que la ciudad no es para él, sea suficiente lección y que cuanta razón tiene su madre. Aunque, no desesperemos, siempre puede haber segundas partes.
Me pasaré por vuestros relatos.
Un saludo.
isan
21/05/2019 a las 13:24
Hola de nuevo
No os encuentro entre los relatos para leerlos y comentar, así que si estáis con otro nombre, decírmelo por favor.
Gracias
María Esther
21/05/2019 a las 23:10
Hola Isan, muy buen relato, ágil entretenido,con estupendo humor, muy bien escrito. Tanto que parece un ventarrón, en un abrir y cerrar de ojos pasó y te quedas mirando la rapidez con que se lleva todo a su paso.Me encantó el tema, muy oportuno, valorizando el “solaz”tan maravilloso del campo; el personaje , auténtico, seguro y decidido, que emprendió la persecución sin temor alguno.
La forma de escribir, el lenguaje empleado, las expresiones populares, el tono cómico,el ritmo, le dan un colorido especial a la narración.
Fue un placer leerte.
Saludos María Esther (59)
isan
22/05/2019 a las 07:47
Hola Martía Esther:
Aprecio infinitamente tua alabanzas. Como señalas, quería valorizar el campo en contraosición a la ciudad.
Te devolveré la visita si puedo hoy mismo.
Un saludo.
El chaval
22/05/2019 a las 12:06
Hola Isan
He visto la escena de la caída, como si estuviera agazapado en la otra escalera a ras de ojos, por lo que todo eran piernas para arriba, que desaparecen, un brazo con el mismo destino y otro con un bolso en la mano, y la caída final espatarrado en el suelo.
Buen relato que me ha hecho reír.
No estoy este mes, me pasó por alto la frase”no tenía coartada”, aunque si que la tenía para justificarme.Solo dispuse de tres horas antes del tiempo para escribir un cuento y no se aceptó, naturalmente. Un saludo y hasta el próximo mes
Pato Menudencio
22/05/2019 a las 17:03
Hola Isan, me ha parecido un relato simpático, con un ritmo ágil que facilita la lectura.
Por otro lado, el protagonista despierta de inmediato simpatías.
Saludos.
isan
22/05/2019 a las 17:32
Hola El chaval:
Tiene que dar rabia presentar el texto y olvidarte de lo necesario. Yo me tiraría de los pelos. Lo bueno es que tendrás más ocasiones, pero no lo dejes para el final que tres horas no es tiempo, no ya para dejarlo reposar, sino para que salga algo bueno. Al menos para mí.
Gracias por comentar aun sin tener relato.
Un saludo.
isan
22/05/2019 a las 17:34
Hola Pato:
Gracias por pasarte y felicidades por tu paternidad.
Luego te hago una visita.
Saludos.
Yoli
22/05/2019 a las 22:04
Hola Isan
¡Qué gozada tu relato! Lo he disfrutado, está muy lleno de imágenes, se siente la acción, engancha por lo que se lee hasta el final para saber en que termina la odisea del campesino.
En cuanto a mejorables, no se si te lo han hecho notar, aunque es más una duda. Cuando tu personaje dice:
…Si no hubiera soltado el bolso, ahora no estaría contándolo —terminó diciendo.
Terminó es un verbo no dicendi, ¿debería ir con mayúscula después del guión? Y si fuera así, ¿hay que poner “punto” después de “contándolo”?, dejar el espacio y luego guión.
Gracias por permitirme aprender con tu relato y las aportaciones de los compañeros.
Me agradaría te pasaras por el mío: #23 Testigo mudo.
Nos seguimos leyendo!
(¯`•¸•´¯)YOLI(¯`•¸•´¯)
isan
23/05/2019 a las 08:11
Hola Yoli:
Me alegro que lo disfrutaras. Para eso estamos. En cuanto a tu duda, interpreto que debe ir con minuscula ya que estamos ante dos verbos donde, creo, que “terminó” tiene una función auxiliar del principal que sí es dicendi. Incluso —y esto no lo tengo tan claro— si hubiera puesto terminó solo, creo que iría en minúscula precisamente por el sentido que tiene la expresión y que lo convierte en verbo dicendi.
Me paso esta tarde por tus corazones.
Un saludo.
Laura
23/05/2019 a las 12:34
Hola Isan.
Realmente, la primera visita a la ciudad no fue muy favorable. Pero, cuando te caes del caballo, debes volver a subir.
Espero la continuación.
Hasta la próxima propuesta.
Isan
23/05/2019 a las 15:09
Hola, Laura:
De momento no tiene intención de repetir experiencia, o sí, de él depende.
Un saludo.
El Apuntador Mudo
25/05/2019 a las 22:01
Hola Isan, llego tarde, pero llego, que no me lo quiero perder.
Aunque después de tantos y tan buenos comentarios poco puedo aportar. Pero sin duda, la lectura, me ha dejado relajado con las risas, con un buen sabor a comedia de posguerra magníficamente actualizada.
He disfrutado con la caracterización, con la acción y con ese humor que brota durante buena parte del relato.
Me ha gustado, he disfrutado y he aprendido.
No me busques, que este mes he fallado. Nos leemos, saludos.
Beatriz Emilia
26/05/2019 a las 05:43
Hola Isan,
Jhonathan y Juan Esteban son alumnos de un curso de bachillerato que estaba dictando, me tomé la libertad de escoger algunos relatos de este taller para que ellos pudiesen interactuar con sus autores.
Les gustó mucho conocer el taller y quizás alguno se anime a participar.
Gracias!!!
isan
26/05/2019 a las 08:28
Hola Apuntad@r:
Tarde no llegas. Lo que ocurre es que, en cuanto salen los relatos, hay una aceleración por comentar y después del día 24 o 25 casi se paraliza. Lástima que no participes. Espero que sea pasajero. Te agradezco por ello doblemente el comentario.
Un sludo.
isan
26/05/2019 a las 08:37
Hola Beatriz:
Es un honor que estubiera mi relato en el paquete elegido. Te doy las gracias y las haces extensivas a tus alumnos. Supongo que no hará falta decirte que les animes a participar porquee se aprende y se disfruta. Sabes cómo funciona el taller y que van a recibir buenos consejos.
Un abrazo.
Javier López
28/05/2019 a las 11:49
Hola, Isan. Hace un tiempo que abandoné estos lares por motivos laborales, y habitualmente me asaltan las ganas de reaparecer, pero por un motivo u otro, no encuentro el momento. En esta ocasión, había decidido ojear los relatos del mes y me encuentro que el tuyo estaba en primera posición así que no he dudado en entrar para destriparlo a gusto, y así recordar viejos tiempos. Quizá no me recuerdes pero solía comentarte de hará un año a esta parte.
Bueno, en cuanto al relato goza de una buena estructura, un personaje carismático y un nudo creíble. Es cierto que (siempre para mi gusto) el empleo de palabras un tanto rebuscadas (sin ánimo de ofender) le restan fluidez, y la escena del robo y posterior persecución, termina un poco trastabillada, como el propio personaje. Esto no tiene porqué ser algo malo per se, pero el tono humorístico puede quedar deslucido por la prosa. Existen multitud de autores que emplean un vocabulario rico y diverso como el tuyo (se me ocurren Terry Pratchett, o Neil Gaiman) y aún así, logran que la vis cómica brille mediante el sarcasmo y la ironía. Humor inteligente. Evidentemente no somos escritores famosos, y estamos aprendiendo, pero es un tipo de relato, difícil de ejecutar, que me encanta y me ha gustado mucho ver que te sale de manera solvente, infinitamente mejor que a mí, por descontado.
Nada que decir sobre la ortografía y la gramática, obviamente ese escalón ya lo superaste con creces.
Un abrazo y espero seguir leyendote.
isan
28/05/2019 a las 15:53
Hola Javier:
Claro que me acuerdo de ti porque fue un tiempo en el que tus relatos eran de lectura obligada (y querida) y te puedo decir que suelo mirar tu nombre y el de algun@as otr@s firmas que seguía por si me dais la sorpresa.
Lo de las palabras rebuscadas es algo que no lo puedo evitar, por lo que quien me lea las encontrará “indefectiblemente”. El caso es que me salen, no las busco.
Te agradezco el comentario, más viniendo de quien lleva tiempo sin escribir por aquí y espero leeerte pronto.
Un saludo.
ortzaize
29/05/2019 a las 14:45
hola que bien se vive en el campo, jaja
este relato engancha. y los compañeros han rectificado lo que han creido oportuno,
por eso aprendemos.
saludos
Isan
29/05/2019 a las 15:14
Hola Ortzaize:
¡ay, la bucólica vida campestre! Luego me paso por tu relato.
Un saludo.