<< Volver a la lista de textos
Estudio sobre la tensión - por Arameo
El autor/a de este texto es menor de edad
Qué maravilla resulta ser el estudio de las tensiones como fenómeno físico. Imaginemos, por ejemplo, la tensión producida en una estructura espiral de captura fabricada con hilo de seda arácnida peluda, la cual se deforma al sentir movimientos erráticos y convulsivos de, digamos, una mosca incauta que, luchando por su vida, intenta escapar de aquellas fuerzas invisibles en las cuales ha caído y qué, cual paredes de un laberinto, se levantan en diversas proporciones con tal de hacerla perecer pese a sus intentos por escapar.
Podemos suponer cualquier cantidad de ideas respecto a cómo aquella mosca acabó en tal situación. Tal vez alguna fuerza natural parecida a la tensión la obligó a buscar alimento o refugio más allá de sus habituales lugares comunes; tal vez en un afán aventurero se arriesgó a traspasar misteriosas fronteras. Lo cierto es que el clímax de su destino final parece, dada dicha situación, ser un pasaporte sin retorno.
Ahora bien, y por más simplista que parezca, el meollo de la tensión se basa sencillamente en la fuerza aplicada entre dos extremos de una cuerda u objeto sólido similar. Por tanto, no sonará para nada extraño suponer que del lado opuesto a este hilo tensado donde ha caído nuestra mosca, se encuentra una araña. Quien, advertida por medio de esta fuerza física, se dispone rápidamente a congregarse con su presa caída. Producto de este encuentro, podremos suponer una batalla sanguinaria en donde, naturalmente, del caos resultará el perfecto equilibrio. Pues a cada fuerza corresponde una reacción.
Cabe resaltar, sin embargo, que las tensiones no siempre son herramientas precisas y que, en el horizonte de las ciencias, donde todo parece exacto, siempre hay lugar para pequeños milagros. Es así como gracias a nuestra imaginación, diremos que la tensión no fue suficiente en esta ocasión y nuestra mosca ha podido escapar de último momento. Dejando a la araña cansada, sentada sobre su telaraña esperando, bien una víctima nueva, bien el fin del mundo. Pues habituada a las leyes de la tensión, se ha percatado de que todo a su alrededor pende de un hilo muy delgado a punto de reventar.
Comentarios (5):
Calèndul
17/08/2018 a las 19:32
Ja, ja, ja. Pero que muy bien. ¿Y tú eres menor? ¡Pues vaya dominio del lenguaje y su expresión! Me gustó tu enfoque científico de un hecho rutinario. Y me gustó imaginarme a la araña sentada pensativa ante su fracaso. Me divertí con tu texto. Muchas gracias. Un saludo.
Florencia M
17/08/2018 a las 21:06
Hola Arameo, me gustó mucho el recurso de apelar a un lenguaje científico, detallista y elaborado para describir algo que puede ser tan irrelevante como una mosca en una tela de araña. Muy buena la oración final, ¡me sentí una araña! Felicitaciones y hasta la próxima.
Seigel
18/08/2018 a las 16:56
Hola Arameo,
Soy una persona a la que no le suelen gustar las descripciones, pero tu texto me ha encantado. Como te han dicho por arriba, tienes un dominio del lenguaje increíble.
Me gusta el uso que haces del lenguaje científico para describir una situación que, de normal, a mucha gente le importaría más bien poco. Muestra un poco que la ciencia siempre está ahí, buscando y explicando todos los fenómenos, sean cuales sean.
Otro punto a destacar es la reflexión final, el cómo un plan perfecto sale mal por, como tú has decidido que sea, un milagro. Me gusta el toque filosófico final en el que la araña se queda pensativa, posiblemente frustrada.
Me ha gustado mucho tu manera de llevar el hilo de la explicación, quizá en algunos momentos he tenido que releer alguna parte por la complejidad de algunas palabras o frases.
Felicidades por tu relato, si quieres pasarte por el mío soy el último de la lista (138).
Un saludo, ¡espero leerte por aquí!
Alétheia
18/08/2018 a las 17:01
Vaya, he aquí una narración científica sobre tensiones, cazadores y presas.
Un ejemplo más que me demuestra cómo la ciencia es otro arte de la metáfora. Pues hablas de tensión física, pero igualmente la situación para los involucrados es tensa: la araña porque se está jugando la cena, la mosca porque está entre la vida y la muerte,y el lector porque está visualizando la acción y espera al desenlace.
Otro ejemplo es el final: “se ha percatado de que todo a su alrededor pende de un hilo muy delgado a punto de reventar”. Si lo extrapolamos a la especie humana, ¿cuál sería nuestro hilo de araña? Quizás el futuro, o para muchos el dinero. A raíz de esto podríamos replantearnos algunas cosas como ¿por qué tendríamos que tener algo de lo que dependa todo lo demás? Podrían ser tantas cosas que en lugar de hilo de araña tengamos una gran columna de tela de araña. En fin, no me extiendo más con esta apreciación.
Siendo tan joven, te felicito por tu expresión. Únicamente incido en el primer párrafo,donde usaste muchas comas y ningún punto. Y en cuanto a la repetición de palabras claves en el texto (tales como tensión, fuerza), es cuestión de gustos y estilo pero te sugiero emplear sinónimos.
Un saludo!! Mi texto es el 120 por si te apetece leerme.
Toñi Avila (vibe)
20/08/2018 a las 20:25
Hola Arameo:
Enhorabuena!
Me ha encantado tu texto. Atrapa como la tela de araña. Escribes con una soltura envidiable,con esa convicción,de esa forma tan resuelta,y esa chispa de ironía,picardía o locura.
Has conseguido involucrarme en tu historia y dejarme una buena sonrisa. El enfoque científico genial, me hizo buscar alguna palabra olvidada .
Te auguro un buen futufo como escritor a pesar de tu temprana edad,no lo dejes.
Felicidades y gracias por escribir.