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Vaya educación - por SauloR.
El anciano encontró la llave en la acera, enganchada a una ramita baja de un arbusto callejero. Le llamó la atención el brillo que desprendía bajo la luz amarillenta de la farola. Cuando la tuvo en sus manos se dio cuenta de que tenía anudada una etiqueta con el nombre de una calle y un número.
—¿Pero a quién se le ocurre dejar la dirección junto a la llave?
La dirección indicada no quedaba lejos de allí, así que decidió darse un paseo para devolver la llave.
Llamó a la puerta de metal y espero unos segundos. Con ruido de óxidos antiguos la puerta se abrió a un espacio escasamente iluminado. Un hombre gordo y calvo llenaba todo el espacio.
—¿Qué quiere?
—Buenas noches, me he encontrado esta llave en la calle, con esta dirección apuntada en la etiqueta.
Le entregó la llave al gordo, que la examinó unos instantes.
—Sí, es de mi hija. La habrá perdido. Muchas gracias.
Cerró la puerta. El anciano se quedó parado un segundo antes de alejarse de allí. Caminaba torpemente, ayudado por un bastón de vieja madera oscura y envuelto en las sombras.
—¿Y ya está? ¿Un gracias y punto? ¿Pero qué se ha creído el gordo ese? ¿O sea, que me preocupo en venir hasta aquí y me despacha con un gracias? Qué poca educación, habráse visto. Así va este país, con gente como esta… Pues no, señor. Esto no se queda así, me va a oír el maleducado ese.
Volvió sobre sus pasos haciendo sonar el bastón sobre el asfalto con golpes secos y agudos. Cuando llamo a la puerta la hizo con nervio, envalentonado. El gordo volvió a abrir la puerta.
—¿Sí, qué quiere?
El anciano levantó el bastón y lo dejo caer con fuerza sobre la cabeza del gordo. Con un golpe seco, el gordo cayó al suelo. Junto a la cabeza se empezó a formar un charquito de sangre.
El anciano volvió a introducirse entre las sombras, más tranquilo.
—Hombre, a ver si se aprende un poquito de educación.
Comentarios (5):
Laura
19/06/2016 a las 12:16
Hola Saulo.
Relato cuidado en sus formas, con una forma bastante extraña de educar por parte del anciano, sin contar con la del hombre.
Desde lo personal no me gusta la violencia en ninguna de sus formas, pero en tu relato encaja perfectamente.
Sigue escribiendo
Paco
20/06/2016 a las 09:37
Hola Saul. Tu relato es directo y se sigue bien el hilo, pero echo en falta un, digamos, mensaje más positivo, ¿devolver violencia por ingratitud? Alguna sugerencia para pulir el texto: ” … bastón de vieja madera oscura y envuelto en las sombras”, quizá habría que separar el texto para que el bastón no quede envuelto en las sombras, sino el anciano. Saludos.
Sergiodammerung
21/06/2016 a las 10:16
Jajajajaja, me encanta. Es corto, directo, claro y gamberro. ¡Sigue cultivando esta forma de narrar!
Shira M. Collins
21/06/2016 a las 16:14
Hola,
Es un texto fácil de leer y con unas simples palabras demuestras que a veces nos creemos los mas educados y no lo somos (el anciano no lo es para mi gusto).
Rápida historia.
Saludos
beba
23/06/2016 a las 02:56
Hola,Saulo:
Felicitaciones por un relato muy simple,sobrio y directo. Y por tu correcto manejo gramatical.
Mi cuento es el 203