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El lápiz mágico - por Ian Pellicer+18

El lápiz mágico

Era domingo y como se hacía cada domingo desde que tenían uso de razón la familia se reunió en la casa de los abuelos. No era un día muy acogedor, estaba lloviendo desde haría dos días y la tormenta no parecía amainar sino todo lo contrario. Los nubarrones se tornaban con el pasar de las horas más oscuro y voluminosos trayendo consigo sus fieles compañeros los rayos y relámpagos.

En el ático donde tenían los niños determinantemente vedado subir, estaba Rosemary. La pequeña de 8 años hacia tres semanas que se escabullía en dirección al desván, esperaba el momento ideal en que todos estaban sumergidos en plena conversación para ascender al lugar prohibido. El ámbito no tenía nada de especial, era oscuro, húmedo y olía mal; no obstante la infinidad de baúles y objetos que cubrían el cuarto le entretenían demasiado, pues nunca sabía que podría encontrar.

Pero ese día de precipitación tras inspeccionar cada rincón, de una vieja repisa apolillada cayó una lata de metal. Rosemary permaneció muda y quieta esperando el subir de los adultos por el ruido que provoco aquel objeto, pero para su suerte nadie escucho nada. Podía oír allí arriba el murmullo de lo que abajo era la batahola de pláticas y risas, eso era muy buena señal pues aún no se daban cuenta de que no estaba cerca.

Mirando el recipiente detenidamente lo levanto del suelo, ensuciándose sus diminutas manos de polvo. Hacía mucho tiempo que nadie tocaba el envase. Era un cilindro decorado con florecillas rosas que años atrás fueron rojas, estaba un poco oxidada y abollada quizás por la caída.

Rosy acercándola a su oído la zarandeo de arriba abajo y esta sonó. Tenía algo dentro y emocionada la destapo; en su interior un estuche encontró. Lápiz mágico estaba escrito en una cinta gastada pegada al embalaje. Y dichosa en sus manos lo inspecciono. Su tía Rebeca tenía uno igual con la diferencia de que dentro guardaba sus anteojos, el que tenía en sus manos no tenía gafas sino un lápiz que extrajo cuidadosamente. Aquel carboncillo era diferente, no era un lápiz amarillo con el numero 2 impreso, de los que suelen comprarles sus padres; no este era negro con un singular símbolo grabado que parecían dos triángulos unidos, solo que uno estaba invertido. Le pareció peculiar porque jamás vio un símbolo igual. Sin embargo como todo niño haría dejo a un lado la imagen y con el lápiz en mano decidió rayar algo.

No encontró ni cuadernos u hojas de papel que pudiera ocupar, lo más cercano era alguna de las paredes que después podría limpiar. Así que muy sonriente comenzó a garabatear en uno de los muros del altillo. Dibujo a su manera un gato, un oso a su mama y papa tomados de la mano y al final para enmarcar su obra de arte, decidió rodearla con un gran circulo que no fue perfecto pero lo intento; no obstante cuando unió sus trazos la línea se ilumino y su dibujo fue remplazado por una negrura que le hiso retroceder unos cuantos pasos. Sus agujetas que estaban sueltas le hicieron caer sentada y así postrada quedo paralizada. Sus almendrados ojitos permanecían abiertos como un par de platos, estaba petrificada. Frente a ella una brecha en la pared apareció, pero no era eso lo que le hiso estremecer de terror, si no los gruñidos de alguna bestia que provenían de dicho agujero.

Lo último que sus pequeños ojos vislumbraron fueron las garras de una criatura que se clavaron en su pie. Un crujir se escuchó y los gritos le acompañaron, el ser volvió a extenderse y esta vez penetraron en su cuerpo y como un pez enganchado la arrastraron al abismo llevándosela entre gritos.

En la parte de abajo todos callaron al escuchar tan horrible alarido, tropezando unos con otros subieron rápidamente hasta la buhardilla. Damián el padre de la pequeña fue el primero en llegar, quedando inmóvil al ver lo que quedaba, de lo que parecía ser había sido su hija. Cuando le toco a Isabela la madre de Rosemary ver lo que estaba ocurriendo, un terrible grito salió de su boca.

En el ático frente a ellos estaba una abertura y delante un pie desgarrado cubierto con un zapato de color rosa. Un charco de sangre emanaba en el suelo y cerca de allí en un rincón escondido yacía el lápiz mágico. Aquel grabado se había borrado, liberando una entidad que traería oscuridad por mil años.

Comentarios (8):

Miki T. Roobinson

29/11/2015 a las 18:05

¡Wow!, terrorífico, sangriento, pero genial. Me gustó 🙂

Ian pellicer

30/11/2015 a las 16:47

Muchas gracias miki t. Roobinson, me pone feliz tu comentario.

Manoli VF

01/12/2015 a las 09:47

Me ha gustado tu relato, en general la escena está bien presentada, pero hay unas cuántas cosas que me han llamado la atención a la hora de pulir el texto.
En algunos párrafos, sobre todo al final, las palabras riman entre sí:”Rosy acercándola a su oído la zarandeo de arriba abajo y esta sonó. Tenía algo dentro y emocionada la destapo; en su interior un estuche encontró” hay muchas frases de este tipo, que con su rima rompen la continuidad narrativa. Revisa también la puntuación, faltan comas, y también hay alguna palabra equivocada del tipo: “determinantemente prohibido” la palabra correcta es “terminantemente” o “esperando el subir de los adultos” que sería: “Esperando a que los adultos subieran”, son pequeñas cosas a tener en cuenta a la hora de presentarlo.

Por lo demás has presentado una escena con mucho acierto, el ambiente de la reunión familiar y esa pequeña que descubre algo que termina siendo tremendo…y el ambiente de nubarrones y tormenta le da su tinte cinematográfico haciéndola muy visual, merece la pena que la pulas un poco. A mí me ha gustado.

Te invito a pasarte por la número 80 y comentar. Un saludo.

M. Blacksmith

01/12/2015 a las 10:19

En líneas generales tu relato es muy bueno, un tanto al estilo Lovecraft, te mantiene con tensión hasta el final. Enhorabuena.

Hay cosas que deberías pulir, he observado bastantes faltas de ortografía, sobre todo a la hora de la colocación de las tildes. Al igual que Manoli VF, hay determinadas frases que al rimar suprimen sonoridad al texto. Por lo demás, comentarte que comienzas un párrafo con la conjnción pero, quizás lo más acertado hubiese sido poner una coma en lugar de un punto y aparte.

PD.: Gracias por comentar mi relato

Ian Pellicer

02/12/2015 a las 16:26

Gracias manoli vf por tus consejos y tomarte el tiempo de leer mi relato, te aseguro tendré muy encuenta tus recomendaciones.
Y también gracias a tí M. Blacksmith por tus palabras, enserio son muy apreciadas.
Saludos

Diana

06/12/2015 a las 00:31

Me ha gustado mucho, no se pierde el interés en ningún momento, y eso es importante. Sigue escribiendo, se te da muy bien.

Un saludo.

Ian pellicer

06/12/2015 a las 00:48

Muchas gracias Diana por tus animos

Lionel Muñoz

06/12/2015 a las 06:13

Gracias por pasarte por mi relato. Me gustó mucho el tuyo, atrapa desde el comienzo. Me creó buenas expectativas y no me desilusionó. Lo único que resalto es la puntuación. Faltan unas comas por ahi.
Saludos

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