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San Martín - por Troya+18

Arrastró el cuerpo inerte de su marido hasta la bañera, lo descuartizó y guardó los trozos en el arcón de la cocina, pensando en lo que él dijo ayer.
De repente sonó el teléfono.
-Diga.
-Hola, ¿Juliana Moreno? Llamo de su empresa de congelados a domicilio, para decirle que mañana vamos a su localidad. ¿Necesita algo?
-No gracias. Me he quedado sola y no consumo tanta comida como antes. Además, tengo el arcón lleno de matanza y no coge nada más –dijo mientras observaba cómo su gato utilizaba de juguete el cuchillo ensangrentado del suelo-. Gracias por llamar –y colgó.

Comentarios (18):

Conxita Casamitjana

28/06/2015 a las 16:45

Troya
Un micro cargado de tétrico humor.
Por mi desconocimiento de este género quizás encuentro a faltar saber más las motivaciones de ella, pero igual tampoco aportan.
Un saludo

Marcelo Kisi

29/06/2015 a las 12:19

Hola Troya!
Qué buen relato! Está excelentemente bien escrito, lleno de un fino humor. El personaje de la asesina capaz de responder un telefonema con semejante sangre fría me parece brillante. Uno se pregunta acerca de la naturaleza de Juliana Moreno, que claramente se divierte mirando cómo el gato juega con el cuchillo (¿deseando quizás que se termine cortando?). ¿De verdad habrá sido tan grave lo que su marido le dijo ayer? ¿O es una psicópata que esperaba cualquier excusa para matarlo? ¿Será este su primer marido muerto? Y así sucesivamente. Un buen relato, creo, es aquel que dispara este tipo de pensamientos y derivaciones posibles. Y el tuyo lo logra. Bravo!

Ismael Tomas Perez

01/07/2015 a las 17:35

Hola:
Que imaginación. Buena historia, me encanta, aunque es un poco tétrica. ¡Felicidades!.
Si te apetece, pásate por el mio 131-Recuerdo

Osvaldo Mario Vela Sáenz

01/07/2015 a las 21:45

Troya , el tuyo es un relato muy bien escrito. Yo al igual que Marcelo me pregunto ¿ Cuantas veces habrá usado el gato un cuchillo como juguete?, pero mas que nada, ¿Qué le diría su marido ayer?

Luciano Sívori

02/07/2015 a las 15:28

Perturbador. Violento. No terminó de captar del todo el título, pero no puedo dejar en qué habrá dicho “él” el día anterior para generar tal reacción. Y el gato se lleva los aplausos.

Troya

03/07/2015 a las 10:14

Muchas gracias a todos por los comentarios. Y a mis dos comentaristas anónimos. Es mi primer microrrelato.

En cuanto a la protagonista en cuestión, pues la verdad es que no tengo ni idea de qué le dijo su marido, tendré que indagar más en si vida y ver qué puedo averiguar.

Luciano, te contesto a lo del título. Lo elegí jugando con la tradición que hay, por mis tierras (y por muchos más sitios), de matar (sacrificar) a los cerdos el día de San Martín, para comérselo durante el invierno haciendo carnes, embutidos… Se suele llamar “matanza”.

Gracias, de nuevo a todos.

Wuldoak

04/07/2015 a las 10:59

Hola Troya.

Primero agradecer tus comentarios, veo que coincidimos en tema, y que aquí también abundan las “reclamaciones de motivaciones”. Realmente, creo que la alusión al comentario del día anterior es más que suficiente para un micro, donde cobra tanta importancia lo descrito como lo sugerido.

Personalmente me gusta ese tono socarrón al final, y en conjunto es redondo. Por cierto, entre el título y el +18, vi venir la carnicería a distancia…

Enhorabuena, saludos.

Leonardo Ossa

04/07/2015 a las 23:24

Hola Troya, me ha gustado muchísimo tu historia. La frase que más he disfrutado de todo el relato es: “Además, tengo el arcón lleno de matanza y no coge nada más.” Me imaginé a una señorona con mucha altivez, luciendo un peinado alto, siendo cuidadosa de no impregnar con sangre la carpeta de croché bajo el teléfono y mirando de soslayo los juegos del gato.
Gracias por divertirme.
¡Saludos!

Luis Ponce

05/07/2015 a las 19:01

Troya: me ha encantado tu relato. Claro, conciso, sin vueltas ni remilgos. El terror para ser terror tiene que ser así, no admite dudas.
Mi opinión: la frase “pensando en lo que él dijo ayer”, me parece un poco forzada y de acuerdo a tus explicaciones, me parece que fue para cumplir con los requerimientos. Nadie mata a su marido por lo que dijo ayer, lo mata en ese momento o se busca otra excusa.
Yo la eliminaría, y en cambio luego, en el diálogo telefónico introduciría una referencia a: “ayer 11 de Noviembre día de de San Martín”.
Tampoco me imagino como Leonardo Ossa a una señora luciendo un peinado alto, después de haber arrastrado a su marido a la bañera, introducirlo y descuartizarlo, porque con el esfuerzo y la sobrecarga de adrenalina, deberá estar sudorosa y despeinada por decir lo menos.
Me gusta mucho, es unja buena muestra de humor negro.
Te felicito.

Troya

06/07/2015 a las 09:59

Gracias Wuldoak, Leonardo Ossa y Luis Ponce.

Leonardo, la verdad que cuando escribí la historia me imaginaba a Juliana de unos sesenta y algo de años y con el peinado típico que las mujeres de esta edad tienen, pelo corto y ondulado. Y el resto como tú bien describes. Eso sí, un poco desaliñada por el esfuerzo como dice Luis.

Luis, en cuanto a tus sugerencias, gracias, las tendré en cuenta, creo que puedo conjugarlo con lo que tengo escrito, todo se puede mejorar, jejeje! Solo quería explicar que para encajar la palabra “ayer”, pensé en algo parecido a lo que me sugieres, pero me parecía que daba muchas explicaciones utilizando “matanza “, “San Martín” en el título y girando la historia entorno a un asesinato. También pensé en que en algún momento llamara cerdo a su marido… Así quedaría más claro el juego con el título.
Y como me parecía que se quedaba un poco coja sin poner nada que hiciera referencia al motivo del asesinato. Por eso opté por poner “pensando en lo que él dijo ayer”, para que se supiera que algo había pasado y encajar la palabra. Y no lo hizo en el mismo instante porque esperó tenerlo todo preparado y cogerlo desprevenido. X) Eso sí lo tenía claro.

Saludos a todos.

Luis Ponce

06/07/2015 a las 17:10

Troya: gracia por tu comentario en el mio, eres muy generosa.
Tus explicaciones en el San Martín, me dejan las cosas más claras y por lo que veo, no es un texto puesto para cumplir con la tarea. Tiene mucho trasfondo, un trabajo previo, una trama interna que no asoma en el texto, pero que el autor la tiene clara, eso es lo importante, saber porqué están las palabras, saber que todo obedece a una idea detalladamente preconcebida, eso engrandece a los personajes y permite justificarlos o denigrarlos.
Te felicito.

Ratopin Johnson

07/07/2015 a las 20:35

Troya, tremendo. Me he quedado con la boca abierta. Y el título es, bueno, no, buenísimo no, buenisísimo :).
A cada cerdo le llega su San Martín. Sin usar la palabra “cerdo” está clarísimo para mí. ¿Y que le diría el marido? Eso nos los ha dejado ahí a propósito para que nos comiéramos la cabeza.
Saludos, me ha gustado

Pato Menudencio

13/07/2015 a las 22:00

Me gustó el humor negro de tu micro.

Saludos.

Merche González

27/07/2015 a las 19:43

Genial tu micro, Troya. Consigues darle un toque de normalidad e incluso de humor a la llamada que sigue a tan tremendo momento. Me ha encantado la escena. Felicitaciones.
Muchas gracias por pasar por el mío y dejar tu comentario. Compartimos la afición por las asesinas “de andar por casa”, jejeje. Un saludo.

Leonardo Ossa

28/07/2015 a las 04:48

Hola Troya. Muchas gracias por haber pasado a leer mi participación mensual y por escribirme una nota. Hasta pronto.
Saludos.

Troya

04/08/2015 a las 11:35

Gracias a todos otra vez. Me gusta que os guste, jeje!

Beba, me he pasado por tu blog y he leído el micro. Es original y simpático. Me gusta cómo juegas con las historias de la Biblia dándole ese toque amable y divertido. También leí el q escribiste de la Torre de Babel y los idiomas.
Espero que lo leas porque no he podido dejar el mensaje en tu blog.

Saludos a todos.

Vespasiano

23/09/2015 a las 19:57

Hola Troya:
He llegado tarde a tu relato, pero después de haberlo leído, inmediatamente lo he conectado con el titulo, pues se suele decir por aquí: “A cada cerdo le llega su San Martin”.
Por tanto queda explicito la clase de persona que debía ser el marido de esta señora.
La historia, truculenta, no es agradable pero está muy bien escrita.
Felicidades.

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