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Adivinanza - por El misántropo autor
Web: http://elamantedelapluma.blogspot.com
El autor/a de este texto es menor de edad
Ayer estaba viendo fotos antiguas. Desempolvando álbumes me topé con mi yo de 9 años; un pillo con cara de ángel que solía fingir.
Mi madre reprendía a menudo, papá era complaciente y el ambiente sano… Recuerdo casi todo. Mamá recurría a una adivinanza para alimentar mi motivación y mis deseos (y para demostrar sabiduría):
“Cuando despierto estás,
Me imaginas a ratos,
Como algo intangible,
Y lejano.
Cuando duermes,
Sueñas con aventuras, donde inundo,
Tu vida.
Cuando te decides y luchas,
Entiendes que siempre estuve,
A tu lado”.
—¿Qué es, ma?
—La felicidad, hijito —respondía.
Nunca tuve muchos juguetes.
Comentarios (9):
Chiripa
29/06/2015 a las 19:56
Hola Misántropo.
Que simpático tu relato y la manera como usaste las palabras de la escena.
Es una bella remembranza de los tiempos idos. ¡Felicitaciones!
Te invito a visitar mi “Depredador” @ https://www.literautas.com/es/taller/textos-escena-27/3685
Denise
29/06/2015 a las 21:14
Lindísimo, y con una filosofía de vida incorporada, me atrevería a decir.
Te felicito!
Luis Ponce
01/07/2015 a las 19:38
hola Misántropo, me gusta mucho tu relato por la frescura que denota tu edad, sigue escribiendo, todos los días.
Saludos.
Leonardo Ossa
02/07/2015 a las 01:34
Hola. He leído muy pocos relatos tuyos, sin embargo observo un cambio en la tendencia que venías imprimiendo a tus historias. Este relato ciertamente es mucho más afín con la ternura sin dejar un fondo una historia de una infancia con limitaciones.
¡Saludos!
beba
03/07/2015 a las 00:38
Hola, Misántropo.
Acabo de volver de tu blog; muy interesante; mucho y buen trabajo de expresión.
Acerca de tu texto es un trabajo bien elaborado y con una óptica original; buen manejo del lenguaje; una mirada emotiva y sentimental sobre la infancia del narrador. Es agradable leerte.
Creo, sin embargo, que la estructura narrativa es débil, y el desenlace impreciso;es más bien una evocación sentimental.
Adelante.
Carme Bureu
05/07/2015 a las 11:08
Haces una evocación al pasado, entre prosa y poesía dejando muchas lagunas, que tiene que cubrir el lector. Es melancólico y sereno, transmites la manera vivir con lo que se tiene.
Palabras y frases escogidas, buen equilibrio en el modo de transmitir emociones.
Me gusto el relato, felicidades.
Te paso mi bloc.
https://www.google.es/url?sa=t&rct=j&q=&esrc=s&source=web&cd=1&cad=rja&uact=8&ved=0CCEQFjAA&url=https%3A%2F%2Fcarmenbureu.wordpress.com%2F&ei=63xxVdf7E8vxUIvogZAN&usg=AFQjCNHMJ3zQfcqXFjNgxRk2LeZrHiq1uA
Saludos
Diego Manresa Bilbao
05/07/2015 a las 17:31
Buen relato misantropo,
Sin embargo, te diria que tuvieras cuidado con la puntuacion, se nota sobre todo en la adivinanza.
Nos leemos!
José Torma
08/07/2015 a las 22:19
Hola, como lo llevas?
Te dire que me gusto, pero acoto mi gusto a los comentarios de Beba y Diego, requieres trabajarlo un poco y veras que mejorara un monton.
Odio lo de menor de edad porque nos situa a bajar estandares o hacer concesiones que no hariamos con un adulto. No caigas en esa trampa. La edad no es nada si tienes claro lo que quieres contar.
Te invito a que leas mucho y no pares de escribir.
Saludos.
KMarce
01/09/2015 a las 05:25
Saludos Misantropo,
A mi me ha gustado la historia, el trasfondo de que la felicidad está siempre ahí, te encuentra y la encuentras.
La estructura, podrá ser cuestionable; pero me parece una osadía hacerlo de la forma que lo has hecho, algo que se permite en los micros, pero siempre con sus reglas.
Tal como dice JoséT, no dejes de escribir, lee mucho más y se curioso en aprender, porque nunca se sabe suficiente.
Cuando leo un relato que dice menor de edad, pienso que aun no es adulto, pero tampoco lo considero un adolescente o un nenito de diez o doce años. Siempre pienso en el tiempo que esa persona puede estar escribiendo y aprendiendo a hacerlo; por ello no me mido para compartir lo que yo he aprendido.
Yo escribí mi primera novela larga (quizá demasiado larga) a los dieciséis años, y me sorprendo ahora, de mi léxico y lo atrevida que era para expresarme sin ponerle tanta mente como lo hago actualmente. Así que los más jóvenes tienen esa ventaja de no ser tan cuadrados, como nosotros los adultos.
Sigue echándole ganas, se nota que disfrutas escribiendo. Te felicito por este relato, a mí me pareció una lectura fresca y reflexiva. Enhorabuena.
¡Nos leemos!