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Tesoro de infancia - por Carlos Rosae
El tiempo y el polvo habían apagado los colores de la cajita metálica que acababa de descubrir por casualidad detrás de la cómoda. La tapa chirrió levemente. El interior contenía el pequeño tesoro que un niño había escondido allí muchos años atrás. Cromos de animales, lápices desgastados, una rana de hojalata… Un juguete llamó fuertemente su atención y despertó su aletargada memoria. Hans recordó entonces, como si fuera ayer, que aquel soldadito de plomo era el único que pudo conservar de toda su colección, cuando aquellos hombres de uniforme gris irrumpieron a grandes zancadas en la panadería de su padre.
Comentarios (12):
Paola
28/06/2015 a las 12:48
Una imagen bien lograda. Evocadora y dura a la vez.
Denise
28/06/2015 a las 23:59
Estoy de acuerdo con Paola. La progresión del relato nos va llevando junto con Hans a la recuperación del recuerdo. Muy bueno.
Darío Lana
29/06/2015 a las 19:35
Coincido. Me ha gustado mucho la imagen que creas, consiguiendo un relato muy emotivo.
Un saludo.
Ratopin Johnson
29/06/2015 a las 21:21
Muy evocador Carlos. Y “los hombres de gris de grandes zancadas” se merecen casi un relato mayor :). Me ha encantado esa descripción, desde la visión de un niño.
Leonardo Ossa
29/06/2015 a las 22:35
Carlos Rosae ¿cómo estás? Gracias por haber leído y comentado mi narración. En cuanto a tu texto, encuentro que el titulo es acertado para lo que cuentas, el contenido y la forma del mismo me parecen excelentes, es una historia que genera sentimientos, se visualiza el cuadro de ese hallazgo. Tienes muy buena factura. ¡Felicitaciones!
Diego Manresa Bilbao
29/06/2015 a las 23:35
Excelente Carlos, como se va metiendo en la historia hasta llegar al desenlace… Una maravilla! Nos leemos!
Carolnefer
30/06/2015 a las 09:01
Hola Carlos,
Coincido con los compañeros, excelente relato de principio a fin. Se visualiza a la perfección.
¡Felicidades!
Conxita Casamitjana
01/07/2015 a las 18:43
Carlos,
Tu micro me ha provocado entre ternura y tristeza, ese emocionado mirar la cajita de recuerdos y como poco a poco vuelven esos recuerdos tristes.
Muy bien contado.
Iracunda Smith
01/07/2015 a las 21:19
Una muy bonita historia con final agridulce, ¡enhorabuena!
beba
02/07/2015 a las 00:05
Hola, Carlos:
Muy buen relato. Es como un prólogo para otro texto mayor. Correcta construcción. Un ritmo suave, nostalgioso, cortado por la imagen gris y las zancadas; qué oposición entre estas imágenes y la palabra “panadería”.
Felicitaciones.
Si quieres leer uno de mis cuentos, te dejo los links:
El primer beso: http://ahorayodigo.blogspot.com.ar/2015/06/paraiso.html
¿Culpa de la serpiente? http://ahorayodigo.blogspot.com.ar/2015/06/cuentos-del-paraiso-1.html
Pato Menudencio
08/07/2015 a las 17:26
oooh, tb hice un relato parecido.
Está bien logrado, saludos.
desiree
10/07/2015 a las 23:51
Hola Carlos!!
Gran relato el que cuentas, me gusta mucho como expones la escena.
Enhorabuena!!
Te invito a leer el mio.
DONDE HAY LOBOS NO CABEN CORDEROS.
Désirée.