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Ataque directo - por Wolfdux+18
Web: http://wolfdux.blogspot.com.es/
Sylvia se coló grácilmente por la ventana y se ocultó tras unas cajas. Había evadido a todos los guardias hasta el momento pero ahora el almacén tenía la puerta custodiada por dos enormes gorilas armados con ametralladoras y tres hombres más, igual de armados, patrullaban. Tenía que cruzar aquella puerta si quería hacerse con los documentos secretos y cumplir la misión. Debatió un instante sus posibilidades, observó su pauta de movimientos hasta encontrar algún lugar por donde poder actuar, tras unos minutos observando se preparó mentalmente.
Descartó un ataque directo, el único escondite eran los pocos pilares que había y las cajas donde ahora mismo estaba oculta, salir de allí supondría exponerse completamente. Pensó en acabar primero con los dos gorilas y usarlos como cobertura para acabar con los tres restantes, utilizando una granada de humo. Pero tenía que salir todo a la perfección y cualquier error sería fatal. Sylvia desenfundó el arma, una pistola tranquilizadora completamente blanca. Disponía de un cargador de cinco dardos, esto la obligaba a no errar ningún disparo. Con la mano libre cogió del bolsillo la granada. La activó y la lanzó rápidamente delante de la puerta.
Al caer al suelo explotó y una nube blanca comenzó a invadir la zona. Saltó por encima de las cajas y disparó a uno de los gorilas, el dardo le impactó en el cuello y antes de notar siquiera el pinchazo ya estaba cayendo al suelo dormido. El otro, alterado tras ver a su compañero en el suelo, buscó en vano con los ojos entrecerrados. No se percató de cómo un dardo le impactaba en el brazo, Sylvia había disparado a ciegas a través del humo. Se llevó la mano al proyectil, un gesto inútil, el suero había penetrado y su efecto ya había comenzado.
Los otros hombres al escuchar la explosión se ocultaron rápidamente tal y como ella había supuesto, rodó hasta el pilar más cercano y desde allí, oculta por la humareda disparó. El hombre oculto cayó de bruces al suelo, ella tras verlo se deslizó hasta uno de los gorilas, y lo utilizó de cobertura como había pensado. —Todo sigue según lo previsto. — se dijo a sí misma. Ahora solo tocaba esperar a que los otros dos se acercaran a investigar y acabara con ellos. Tardó unos instantes en percatarse de que la granada dejaba de funcionar, la silueta de dos hombres acercándose uno por cada lado comenzó a dibujarse a través de la cortina de humo. — ¡Estas rodeada! —gritó uno de ellos. Sylvia disparó nuevamente y el dardo impactó en la pierna del que se acercaba por la derecha, lo que provocó que cayera al suelo y antes de que el otro se diera cuenta, disparó rápidamente su último dardo.
Tras el tiro sólo se oyó un ruido metálico, la velocidad con la que se había efectuado el disparó el proyectil impactó con la arma y no con su portador. Al darse cuenta de que había errado se decidió por salir de su cobertura y atacar directamente a su enemigo. El hombre, que había retrocedido ante el disparo, volvió a ponerse en posición defensiva, apuntó y trató de disparar. El dardo de Sylvia había impactado en el gatillo haciendo imposible que la ametralladora pudiera disparar, ante la sorpresa de ver como su arma no disparaba y de cómo la mujer se le abalanzó emergiendo de la humareda, no pudo evitar la patada que esta le dio. Cayó de espaldas al suelo y antes de poder reponerse otro nuevo ataque de Sylvia estaba en camino. Este si pudo evitarlo, con un movimiento rápido esquivo un puñetazo y con un golpe seco del codo hizo caer a la mujer. Ambos estaban medio tendidos en el suelo, lentamente se levantaron y adoptaron posiciones defensivas. El primero en atacar fue él, trató de propinarle un rodillazo en la pierna, Sylvia a duras penas pudo esquivar el ataque. Sin percatarse otro feroz golpe fue directo a su cara, notó los nudillos en su mejilla y cayó fuertemente contra el suelo. Desde el suelo notó como la sangre le corría entre los labios, trató de levantarse. El hombre con paso seguro se acercó a ella y levantó el puño para darle el golpe de gracia.
—Alto, Cabo Maeso. Es suficiente. La recluta ha aprendido la lección. — habló una voz por un altavoz. —No hacía falta que pegaras tan fuerte. —le recriminó Sylvia a su agresor. —Un entrenamiento debe de efectuarse como si una misión real se tratara. —añadió él fríamente.
Comentarios (17):
forvetor
28/02/2014 a las 17:58
je, tengo debilidad por estos relatos de aventura por la aventura ^^. el objetivo de la escena lo cumples con creces, bastante sofisticada la escena de pelea. pero sigues cayendo en repeticiones excesivas (por ahí hay dos frases con tres o cuatro “oculto” y ni me molesté en contar los “impactó”) y en fallos gramaticales y ortográficos que te quitarías revisando el texto un par de veces 😉
un saludo, nos leemos!
Sergio Mesa / Forvetor
http://miesquinadelring.wordpress.com
Wolfdux
28/02/2014 a las 18:50
Gracias Sergio,
los comentarios que he recibido hablan también de ello. ¡En breve me paso por tu relato y te digo que tal!
Cibeles
28/02/2014 a las 22:53
Estoy de acuerdo con forvetor en cuanto a la narración, pero la pelea está muy bien pensada, me gustó.
Aina Pons Triay
01/03/2014 a las 12:34
Wolfdux, Sergio ya lo ha comentado, hay alguna falta (esquivó un puñetazo) y en menos de 4 líneas hay varias veces variaciones de “disparar”.
Pero a mi me ha gustado, es entretenido y me gusta el giro final de “era un entrenamiento, no hacía falta que me hicieras sangrar, hombre” ;).
¡Nos leemos!
Wolfdux
01/03/2014 a las 12:48
Muchas gracias a las dos por comentar. Si que es cierto que mientras estaba revisando el texto, había palabras que las repetía mucho y traté de buscar sinónimos que no hicieran tan repetitivo el texto, pero por lo visto no lo conseguí, imaginaros como sería antes de revisarlo, jejeje. Un abrazo.
Emmeline Punkhurst
01/03/2014 a las 16:26
Hola Wolfdux:
Me parece una narración de acción muy creativa y trabajada. Como te han comentado otros compañeros, repasaría un poco el texto para eliminar las típicas erratas pero, por lo demás, le imprimes un ritmo trepidante al relato.
Me ha gustado también el final. Lo cierto es que no me lo esperaba y me parece muy original.
Wolfdux
01/03/2014 a las 16:46
Me alegra ver que te ha gustado Emmeline, muchas gracias por pasarte por aquí y leerte el texto. Uno de tantos fallos que tengo es que me cuesta horrores revisarme los textos y eso me pasa factura, pero no te preocupes estoy en aras de mejorarlo.
¡Gracias, nos leemos pronto!
Virginia Figueroa
02/03/2014 a las 00:18
Desde la línea uno comienza la acción y eso hace que te intrigue desde el principio. Es fácil meterse en la piel de Sylvia, Wolfdux. Describes a la perfección la escena.
El final también me ha gustado, no es el típico. Enhorabuena.
Lo que me suena raro es lo de la “cobertura” para aludir a su “escondite”. Al leerlo la mente se me iba a imagenes de repostería (por recordarme al chocolate de cobertura, jaja) y eso hacía que me fuese de la historia. Yo emplearía otro concepto. 😉
Un saludo!!
Wolfdux
02/03/2014 a las 10:47
Gracias por tu comentario Virginia y me alegro de que te gustara. Me he vuelto a releer el relato para comprobar lo que decías y me ha pasado como a ti, pero no sé si porque lo has dicho tu o porque realmente da esa impresión, jejeje.
¡Ahora mismo me paso por tu relato!
lunaclara
02/03/2014 a las 12:33
Hola! Me ha gustado mucho tu relato. Has descrito con perfección el enfrentamiento, y el lector puede imaginarselo muy claramente. Lo de desvelar al final que se trataba de un entrenamiento ha sido muy buena idea. Felicidades!
Wolfdux
02/03/2014 a las 12:45
¡Gracias Lunaclara por pasarte por aquí y comentar!
Juan F. Valdivia
02/03/2014 a las 12:59
Hola.
Pues he decir una cosa: desde el primer momento me parecía que estaba presenciando la versión narrada de un típico arcade de plataformas. No sé si eso resulta positivo o negativo como comentario, pero es que las cajas, el tener que saltarlas para avanzar, la manera de contar los enemigos, la bomba de humo y cómo se diluye al cabo de nada… estaba esperan el mítico ‘Insert coin’ de mi años mozos 😛
En cuanto al estilo te destacaría que debes intentar no meter los odiosos adverbios acabados en -mente. No sólo Stephen King recomienda no usarlos JAMÁS: más gente, y yo mismo, los evitamos como la quema dado que anulan posibles descripciones y texto visual/sensorial enriquecido. En vez de un -mente describe lo que ese mente quiere decir. El texto ganará en belleza. Y que varios -mente casi seguidos a mí me invita a dejar de leer.
Un saludo.
Wolfdux
02/03/2014 a las 13:07
Gracias Juan,
los adverbios y yo tenemos una lucha desde el inicio de los siglos, jeje. No eres el primero en decírmelo, de hecho, en los últimos relatos que estoy haciendo estoy tratando de colocar los mínimos posibles, es más, desde que me lo han dicho varías personas esto de los “-mente” cuando escribo uno pienso: ¡Mierda, aquí hay uno!
Así que supongo que poco a poco iré colocando menos, o eso espero, soy un poco cabezón…
Ada Lena G. P.
03/03/2014 a las 21:13
¡Jajaja, Wolfdux! Menudo el contraste que has creado entre el título: “Ataque directo” y el cómo planteas que tu protagonista lleve adelante la acción: grácilmente, descartando un ataque directo, preparándose mentalmente antes de actuar… todo muy propio dentro del comportamiento femenino.
Un golpe de efecto magistral, que rematas al final con ese refrescante y revelador diálogo, donde nos haces saber que la protagonista está efectuando un entrenamiento.
Me he despitado cuando has usado en el mismo contexto vocablos como: gorilas, dardos, pistola tranquilizadora, pues no sabía si Sylvia se estaba enfrentando a primates o a hombres, pero lo salvas en el párrafo con el que continuas al aclararlo con la palabra “hombres”. Personalmente opino que pulir el empleo de ciertos campos semánticos redundaría en una mayor armonía para la comprensión de tu relato, evitando ciertas confusiones momentáneas para el lector.
En fin, te felicito por tu trabajo, Wolfdux.
¡Buena estrategia para ganar esta batalla escrita!
Saludos.
Wolfdux
04/03/2014 a las 09:08
Muchas gracias Ada por tus palabras y me alegro que te haya gustado.
¡Nos leemos!
José Torma
10/03/2014 a las 16:44
Como te comento alguien por aqui. Tu relato y conforme avanzaba, me remitia a un tipo de video juego donde la heroina va avanzando niveles al mejor estilo de Lara Croft. Para mi el hecho de tener una heroina es mas que meritorio. Algo que yo al ser varon no logro hacer todavia.
Me gusto mucho la psicologia de la protagonista y el giro final te pone una sonrisa en el rostro.
Felicidades y debo de admitir que yo ni cuenta me di de los advervios y demas.. la verdad es que probablemente yo padezca de lo mismo aunque no me lo han comentado.
Un abrazo y nos seguimos leyendo.
Wolfdux
14/03/2014 a las 09:51
Muchas gracias José por tu comentario y por pasarte a leer mi relato.