Literautas - Tu escuela de escritura

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Yet another Cinderella - por lunaclara

Web: http://mhelengm.blogspot.com.es

Apuré el paso al escuchar las doce campanadas. No podía llegar tarde a casa, ¡mi madre me mataría! Si descubría el pastel podían caerme diez años más de trabajos forzados. ¿Por qué mis hermanas sí y yo no? Pregunta que rápidamente eliminé de mi mente porque en ese momento no obtendría respuesta. Tenía que irme.

Dejando el mojito en una mesa, me remangué la falda de mi supervestido color nude, cubierto de encaje con pedrería y escote de cuello de cisne…¡Dios, era maravilloso! ¡Nunca había visto nada igual! Estaría eternamente agradecida a mi madrina. Ni mis hermanas me habían reconocido… Y como otra Cenicienta más, con el corazón apretujado por la tensión del momento, sin despedirme de nadie, eché a correr tan rápido como me dejaban mis hipos. Abandoné los tacones azules con glitter por el interminable pasillo principal de aquella inmensa casa señorial. Miré atrás un segundo, como la mujer de Lot, pero no me convertí en estatua de sal, sino que me percaté de que me había enamorado aquella noche. No sabía si volvería a verlo.

Lloraba como una magdalena, no tanto porque dejaba allí mis zapatos fashion sino porque también dejaba plantado al chico que los recogía y con el que había estado toda la noche de buen rollo, bailando sin parar y bebiendo mojitos. ¡Mira que irme justo cuando comenzaba lo mejor de la noche! ¡Qué guapo era! Alto, rubio, ojos azules… Todo en su sitio, la verdad; además de culto y bien educado, ¡ahgggg!, el típico príncipe que todas queremos en nuestro cuento. Aunque este no era de la realeza, solo el hijo mayor de quien manejaba todas las industrias del pueblo; recién llegado de la riviera italiana, licenciado en Derecho y buscando novia. El reclamo ideal para que todas las chicas se desvivieran por una invitación.

Yo no necesité invitación para aquella fiesta, simplemente me colé, como los de Mecano. Bueno, más bien me colaron. Culpa de mi madrina. Yo ya echaba de menos que nos sacudieran las novedades. Pasarte el día limpiando y cocinando para tres mocos esmirriados, perdón, para mi segunda madre y mis dos hermanastras, no es que sea precisamente el no va más. ¿Por qué no hacía huelga? Inicialmente mi padre me dijo que cuidara de ellas, y aunque me daban un poco de pena, les cogí cariño. Aun así, a esas alturas, siendo sincera, ya existía algo de desmadre.

Necesitábamos juerga y aquella fiesta nos venía como anillo al dedo. Aunque yo en un principio no tenía derecho a ir. Para qué iba a discutir con la mater. Entonces llegó mi madrina a pasar una temporada en casa dos días antes del gran evento, y viendo el panorama, decidió meter mano. Mi casa se convirtió en una jaula de grillos: dos chicas entradas en carnes queriendo meterse con calzador en sendos vestidos de tubo… ¡Yo estaba tan contenta! Solo a ella se le podía ocurrir llevarme como una camarera más. Me llevé todos los avíos y allí mismo me transformé.

Tras las campanadas, Sebastián, el marido de mi mentora, me esperaba calle abajo montado en su moto BMW de guerra. ¡No podía ser más discreto! Con ella paseaba a su mujer por todo el pueblo, pavoneándose muertos de risa delante de los vecinos, que los miraban con algo de miedo en el cuerpo, ya que la moto rugía con fuerza y de vez en cuando escupía grandes bocanadas de humo por su tubo de escape.

En ese momento no había un alma en la calle, pero si hubiera habido alguien no me habrían reconocido: el moño alto que me había hecho con el pelo ya no existía, y mi cara era un collage de maquillajes por mis lloriqueos. Estaba muy triste. Sebastián apenas me miró. Arrancó la moto sin decirme nada y yo, ignorando al sidecar, me acurruqué detrás abrazándome a él. ¿Por qué mis hermanas sí y yo no?, volvía de nuevo a preguntarme. Las imaginaba acercándose a Miguel, ávidas de placeres y comodidades, parloteando como cotorras, tocándolo con sus grandes y sucias manos… Cerré los ojos. ¡Qué angustia!

Tras dar un rodeo y sin apenas hacer ruido, cosa sorprendente, llegamos a casa. Salté de la moto más espabilada, gracias al aire frío de la noche. Le di un beso a Sebastián y corrí hacia el corral. Cambié mi precioso vestido por un pijama desteñido. Lo doblé cuidadosamente. Sonriendo agradecida lo metí en una bolsa de basura, donde estaría resguardado de miradas inquisidoras, y me fui a dormir.

Comentarios (41):

Gandalf

28/01/2014 a las 14:16

Me ha gustado mucho como has actualizado la historia y la forma de contarla. Enhorabuena.

Seshat

28/01/2014 a las 14:32

Pero Cenicienta, ¿qué jerga es esa? jajaja me ha encantado tu relato, y tu reinterpretación (y actualización) de Cenicienta, haciéndola parecer más cercana y, si me lo permites, algo pija, en plan peli americana. La verdad es que le da personalidad.

José Torma

28/01/2014 a las 17:08

Otro hit.

Debo de admitir que cuando vi el titulo pense lo peor, pero luego recorde quien es la autora y me lance a disfrutarlo.

Un abrazo y como ya te lo dije, soy tu fan. El tuyo es el primer relato que me leo.

Felicidades.

lunaclara

28/01/2014 a las 18:29

Gracias Gandalf!! Tu nombre es muy admirado por una servidora, jajajaja…A ver si me paseo por los otros relatos. Seguro que hay muchas cosas buenísimas.

lunaclara

28/01/2014 a las 18:30

Seshat, gracias! Tenía ganas de crear a mi propia Cenicienta, jijijijiji. Se trata de jerga made in casa propia. Sí, más que pija la llamaría moderna, pero lo que capte cada uno es de mi total respeto.

lunaclara

28/01/2014 a las 18:32

Gracias, José Torma. Para mí es un honor que me leais. Escribir es mi mayor pasión.
El título en español sería algo así como “Una Cenicienta más”; y es que es eso realmente. Nos leemos!

Wolfdux

28/01/2014 a las 20:16

Hola lunaclara,

como ya han dicho mis compañeros es una reinterpretación muy divertida y lograda. ¡Enhorabuena!

Miranda

28/01/2014 a las 22:16

Hola Lunaclara,

Te descubrí el mes pasado, al estar la primera y me gusto mucho, así que este mes te he buscado, me ha parecido divertidísima esta camarera, cenicienta, en moto y con madrina, puedo imaginármela con la descripción que haces. Genial. seguiré leyéndote.

Si tienes un ratito, me gustaría que también me leyeras y comentaras, soy nueva por aquí, bueno esta es la tercera escena, me incorporé en Noviembre y me gustaría tener algún lector que me siga antes de que llegue a estar entre los 10 primeros, si llego alguna vez.

Sigue escribiendo

lunaclara

28/01/2014 a las 22:31

Gracias Wolfdux! Me alegra que te haya gustado. Saludos!

lunaclara

28/01/2014 a las 22:34

Gracias Miranda! Qué bien que te haya gustado. Es honor que me leas, de verdad. Espero que disfrutes mucho por este blog y que escribas un montón. Así es cómo se aprende!! Nos leemos 😉

Servio Flores

29/01/2014 a las 04:27

como siempre muy bueno. es un gusto leerle. gran actualización de la cenicienta.
Felicidades.

lunaclara

29/01/2014 a las 08:42

Gracias Servio! Para mí también es un placer leerte.

Emyl Bohin

29/01/2014 a las 11:54

Hola lunaclara

Hacer una revisión de un cuento clásico es arriesgado, y mucho más del de cenicienta porque no tiene versiones ni “na”. Pero te ha quedado muy bien, fresco y divertido. Una cenicienta pop muy visual. Me ha encantado y además instructivo, porque al no saber que color era el nude he decidido buscarlo y fíjate tú, es una marca de moda de mujer especializada en vestidos de fiesta, vestidos de novia y ropa sport chic. ¡Pa la saca!

Hasta el siguiente.

lunaclara

29/01/2014 a las 12:12

Gracias Emyl Bohin!! Me alegran mucho tus comentarios. Puede ser que lo suba al blog algo más extenso. A ver si me da tiempo.
Sí, colour nude es una marca de moda, pero también es un color que aglutina todas las tonalidades beige, el color de la piel, y que usan muchas celebrities en sus zapatos, porque dicen, dicen, que estira las piernas, jajajajaja…

Gracias, de nuevo, y nos leemos!!

borja

29/01/2014 a las 12:31

Hola!!
Interesante reinterpretación. jejeje. Me gustó mucho, aunque la jerga(entiendo que la usaste para recrear el tiempo, las modas orales, la juventud…) me saca un poco, ya que la veo un poco artificial. Aunque puede ser cosa de lo que yo esté acostumbrado a escuchar, y cómo lo escucho.
Un gran trabajo.
Un saúdo!!

NHICAP

29/01/2014 a las 13:42

Hola Lunaclara,
Estupenda recreación de un personaje inmorta, que guardamos en el espacio reservado a nuestra memoria de la infancia Un relato trabajado, con mucha frescura y muy divertido.
Me emcantó esa Blancavieves en versión actual tan autentica. Resulta, ¿Friki o Cool?. Quizás ambas cosas y muchas más.
Cuando amplíes el relato, sube a Blancanieves a una Harley en vez de a una BMW. Je,je
Felicidades y nos seguimos leyendo

lunaclara

29/01/2014 a las 13:47

Hola Borja! Es una forma de hablar informal. Aquí en España se usa mucho por los jóvenes y no tan jóvenes… Gracias por tu comentario!!

lunaclara

29/01/2014 a las 13:49

Nhicap, qué bien tenerte por aquí. Gracias por pasarte!!
Es Cenicienta, Cenicientaaaa!!! jajajaja… Elegí la BMW por respeto a Sebastián, su dueño, un señor mayor, quizás de esa época, marido de la súper madrina, jejeje…
Llamemosla Cenicienta cool, jajaja….
Gracias!

NHICAP

29/01/2014 a las 14:52

Sorry por el desliz sobre Cenicienta. ¡ No se puede pensar en varias cosas a la vez mientras se plasma un comentario a tu texto!

Lo de la Harley seguro que Sebastián lo entendería, ja,jaj

Borja

29/01/2014 a las 15:18

Ya se que se usa en España. Jajajah. De dónde crees que soy? Soy gallego y tengo menos de treinta años, jejejr jee. Sólo te comentaba que la jerga me despista en la narración , y que puede que sea por que no es la que yo uso, o en mi zona es más popular otra. Lo cual no quiere decir nada malo. Tan sólo eso.
Un saludo

Un farero impaciente

30/01/2014 a las 12:37

Hola lunaclara. Esta mañana, mientras me tomaba un cappuccino (y tres cruasanes), he tropezado, por casualidad, con la página de Literautas. No la conocía. Rebuscando, he tropezado con los relatos de este mes y, por fin, he tropezado con el tuyo. Sí, ya lo sé, un montón de tropiezos para ser un jueves.
Después de leerlo dos veces, la primera de prisa para ver como acababa (mi impaciencia…) y la segunda para saborear los detalles, no he podido evitar escribirte estas líneas porque me he quedado con una duda. ¿Cómo acaba la historia? ¿La Cenicienta pija consigue al príncipe? Dime que sí porfa, me encantan las historias que acaban bien… Creo que veo demasiadas películas americanas. Tendré que dejarlo.
Bueno, bromas aparte, me ha gustado mucho tu relato. Has conseguido distraerme y alejarme, durante un rato, de mis preocupaciones diarias. Y te lo agradezco.
Para la próxima entrega, enviaré yo también un relato. Cuento contigo… para leerlo.

Virginia Figueroa

30/01/2014 a las 20:20

Hola lunaclara!
Me parece una buena y divertida versión de Cenicienta, coincido plenamente con todos los comentarios que te han hecho.
Curiosamente me tocó comentar un texto que hace también una versión de este clásico, es el 68.Érase una vez… a ver si tienes tiempo de leerlo y comparar. También lo ha actualizado como tú.
Enhorabuena, me has entretenido un ratín. Esperaba enterarme de si el buenorro que mi mente se imaginó (algo parecido a un Brad Pitt de la vida) salió corriendo detrás de esa camarera que le dejó tocado y hundido o si se pilló tal cogorza de mojitos que no pudo con su alma… y el cuento se acabó! Danos más informacióooon yaaa!!! 😉

Forvetor

30/01/2014 a las 23:29

veintidós comentarios más tarde ya me queda poco que añadir. redacción estupenda y tema super divertido, un gustazo de leer. como el amigo Torma yo también me asusté al leer el título, pero la verdad es que le viene que ni pintado, en ingles suena aún más cool 😉

lunaclara

31/01/2014 a las 08:28

Muchas gracias, farero impaciente!! Me alegra mucho que mi relato te haya distraído, pero no puedo decirte cómo acaba porque aun no lo sé… Estoy pensando en ampliarlo un poco y colgarlo en mi blog en cuanto me dejen mis ocupaciones diarias.
¿Te seguirás llamando farero impaciente? Lo digo por identificar tus relatos.
Gracias de nuevo!

lunaclara

31/01/2014 a las 08:30

Hola Virginia! Te agradezco un montón que te hayas pasado por aquí y encima me hayas dejado tus comentarios. Vamos a ver si puedo continuarlo y no dejar a la pobre Ceni tan triste. Prometo un reencuentro! Lo que ocurre es que tengo en mente ampliar y publicar otros relatos en mi blog, pero no doy para tantoooo!!!
Gracias y nos leemos!!

lunaclara

31/01/2014 a las 08:35

Forvetor, gracias!! Puse el título en inglés por eso, porque sabía que podía caer en el tópico, y solo me gusta recurrir a eso en contadas ocasiones. Quería llamarlo “Otra Cenicienta más”, y en inglés está mucho mejor.

un farero impaciente

31/01/2014 a las 10:22

Sí, voy a seguir con “un farero impaciente”. Desde cuando, hace casi un mes, conseguí hacerme con la única llave del faro me he autonombrado “farero oficial del reino”. Y hasta que alguien de la administración local no se entere, voy a disfrutar de mi faro personal. En fin… ya veremos…
Ahhh, una cosa más. Tienes casi treinta comentarios. ¡Qué glamour! Eres la escritora de moda. Me tienes muy, pero que muy impresionado…

Vicente Díaz Pacheco

31/01/2014 a las 11:42

Lo primero que quiero es felicitarte por tu relato. Has vuelto a poner de moda la cenicienta, con tu particular versión y tu manera de hacer las cosas, con su propio lenguaje. Te ha quedado muy bien, enhorabuena.

Eloyzinho

31/01/2014 a las 14:02

Hola, lunaclara.

Me ha gustado tu relato: el uso de un vocabulario moderno y lleno de términos importados, produce un efecto de glamour divertido y muy original. Por cierto, me ha gustado la referencia a la mujer de Lot, un tema que cito en mi relato “Estatua de sal”, correspondiente a la escena del mes de mayo “Móntame una escena de principio a fin”.

Ahora unas puntualizaciones. He observado un par de faltas de ortografía (en “aunque este no era de la realeza…”, debería ser “éste”; y “riviera” debería ser “Riviera”). Aparte, he perdido un poco el hilo de la narración entre el quinto y el sexto párrafo, en parte a que la transición de pasado a presente narrativo me parece algo brusca, aunque reconozco que quizás en parte sea culpa mía, por estar concentrado en la sucesión de eventos que la llevaron a la fiesta, ya que sí que dejas claro que el momento vuelve a ser “tras las campanadas”. También echo en falta una primera alusión al nombre del “príncipe” (en este caso “Miguel”), que sólo nombras hacia el final del relato. He encontrado una redundancia (“invitación”), aunque en este caso no me parece que rompa la lectura.

En fin, me ha costado encontrarle pegas, y las que he citado creo que son menores. Que sepas que pienso que escribes bastante bien 😉 Buen trabajo 🙂

lunaclara

31/01/2014 a las 16:38

Gracias Vicente!!! Un placer que me hayas leído. Nos seguimos leyendo!

lunaclara

31/01/2014 a las 16:40

Eloyzinho, muchas gracias x tu gran comentario. Me alegra mucho q me leas y q me corrijas, lo tendré en cuenta cuando lo suba al blog.

Marazul

31/01/2014 a las 22:08

Ese estilo glamoroso que tienes lunaclara…..está muy bien, muy requetebien y a mi me gusta. No siempre los temas han de ser desagradables…….tremendos. La mayoría de los/las lectores/ras buscan evadirse. La vida ya se encarga de darnos palos. Además presiento que si tuvieses que tratar un tema ” duro” también lo ibas a hacer igual de bien…….no sé si me explico……me parezco un poquito a ti. De marazul a lunaclara. Saluditos

lunaclara

01/02/2014 a las 00:40

MaraZul, gracias! Que bien que te hayas pasado. Sí, los lectores buscan evadirse, divertirse, reflexionar, sentir.., cosas q sabremos dar si escribimos mucho.
Nos leemos!!!!

David Rubio

01/02/2014 a las 01:52

Lo que más me ha gustado es la agilidad y frescura de la primera parte del relato. Alcanzar esa naturalidad, conseguir que el autor desaparezca y hable el personaje, eso es muy difícil. Saludos

R. Mac

01/02/2014 a las 13:35

Felicidades por el relato, cuando lo he empezado a leer no esperaba que fuese algo así, pero me ha sorprendido gratamente y me ha gustado.

Un saludo!

lunaclara

02/02/2014 a las 23:39

Gracias, David. Un honor tenerte por aquí. Nos leemos.

lunaclara

02/02/2014 a las 23:41

Gracias, R.Mac. Siempre intento q mis relatos sorprendan. Hasta otra.

Emmeline Punkhurst

05/02/2014 a las 20:54

Hola lunaclara: desde luego cada vez que leo un relato tuyo tengo la impresión de que te cuesta muy poco crear historias, que tienes una facilidad de palabra natural y que escribes, si podemos robar la expresión con la que designaban a Pelé, “bonito bonito”.
Ya tengo ganas de leer tu próxima historia.

lunaclara

05/02/2014 a las 22:15

Gracias Emmeline!!!! Que honor tenerte por aquí. No sabes cuanto te agradezco q me hayas leído y encima comentado…. Nos seguimos leyendo;!!

Aurora

09/02/2014 a las 13:31

Me encanta esta versión 2.0 de la Cenicienta, pero me asalta una pregunta ¿algún día vas a poner un final feliz? Es broma, me encanta ese escepticismo, la forma en que planteas situaciones a priori románticas y las dejas en suspenso, con protagonistas independientes pero en parte frágiles.

lunaclara

09/02/2014 a las 17:49

Sí, Aurora, gracias. Como la vida misma, jijiji. Me alegra mucho q te guste. Seguimos en contacto. Saludos!

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